El frondoso manzano de Apple tiene su rama aragonesa. Es delgada pero vigorosa y está formada por un selecto grupo de empresas y emprendedores que ha crecido al calor del líder mundial de la electrónica de consumo. Sus negocios se han hecho un hueco en los escasos márgenes que el gigante tecnológicos deja a la participación de firmas externas a su corporación, en los campos de la distribución y la reparación de productos. Un ecosistema que compañías de la comunidad como K-Tuin, Consultis o L&T han sabido aprovechar. Otras tantas firmas informáticas han tratado de abrirse camino en el desarrollo de aplicaciones para sus populares dispositivos Iphone o Ipad, cuyo universo de accesorios ha abierto también un suculento mercado.

No es nada fácil trabajar con Apple, ya que cimenta su filosofía empresarial en el control casi absoluto de todos sus procesos. De hecho, las pocas empresas españolas que venden sus equipos proceden de la anterior estructura de distribución de la compañía del fallecido Steve Jobs, que antes carecía de venta directa y estaba especializada en un público profesional. Estos son los casos de las aragonesas K-Tuin y L&T, distribuidores autorizados de la firma desde antes de su eclosión y que han vivido en primera persona la revolución comercial que los productos de la manzana, lo que les ha permitido crecer en tiempos de crisis. Antes sus computadoras iban dirigidas a un público profesional, de sectores como el diseño, el audiovisual o la impresión. Pero Apple decidió dar un giro a su negocio y reinventó el consumo electrónico con el reproductor de música iPod, el telefono móvil iPhone o la tableta iPad, cada uno de los cuales ha abierto un nuevo mercado. El éxito mundial de estos dispositivos ha sido incontestable.

"Antes quien compraba un ordenador Mac era visto como un bicho raro, pero el público se ha universalizado", explica Rafa Cayuelas, director general de K-Tuin. El apogeo de la marca estadounidense ha tenido su replica a pequeña escala en esta empresa aragonesa, que ha dado uno de los mayores mordiscos a la tarta de Apple en España, donde es hoy líder en la venta de estos prodigiosos productos. Tiene una red de ocho tiendas (Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia, entre otras, además de Zaragoza) y está acreditada como distribuidora Premium Resellers, el máximo nivel.

K-Tuin no es un recién llegado. La compañía forma parte del grupo Bancale, la family oficce del empresario zaragozano Juan Fabre, que fue uno de los primeros que comercializó computadoras Apple en España en 1984, cuando abrió su primera tienda de informática en Zaragoza. Pero no fue hasta 1994 cuando creó la marca K-Tuin, en una clara apuesta por la especialización en los productos de la manzana, cuyos ordenadores ya eran muy valorados por su fiabilidad y diseño.

Zaragoza, pionera

La primera apertura fue en Madrid y el éxito fue tal que ese mismo año abrió en Barcelona y Bilbao. Así hasta llegar a las ocho actuales y subiendo: espera cerrar el 2012 con 12 centros (el próximo en Andorra) y llegar a 15 en el 2013. Este crecimiento se tradujo en el 2011 en una facturación de 60 millones de euros, un 20% más que en el 2010. En el plano laboral, K-Tuin cuenta con 110 trabajadores, 40 de ellos en Zaragoza repartidos entre la tienda de la calle Cinco de Marzo, las oficinas centrales de Gómez Laguna y el centro logístico de Plaza, desde donde distribuye sus productos. Y también desde la capital aragonesa gestiona su tienda virtual.

"Históricamente Apple ha tenido un alta penetración en Aragón porque la Universidad de Zaragoza fue pionera en la introducción de sus ordenadores. Era las que más Macintosh tenía en España", explica Cayuelas, quien llegó a conocer a Jobs en una presentación internacional de uno de los equipos de la compañía.

L&T es otro viejo aliado de Apple en Aragón. Esta tienda informática abrió sus puertas en Zaragoza en 1997, como distribuidor oficial de los ordenadores de esta marca. "Posiblemente no existiríamos si no fuera por Apple, porque el resto de las marcas se han venido abajo", señala Antonio Torres, gerente del establecimiento, que se ha especializado en los clientes de empresa. Esta pequeña firma, de 1,5 millones de euros de facturación anual, también ha saltado al mercado nacional pero con internet, con su tienda virtual VivaMac, que le aporta ya el 50% de sus ventas.

Sobre el arreglo de los ordenadores y dispositivos de la manzana pivota la actividad de la consultora zaragozana Consultis UniversoMac (ver información de la página anterior). Este es el único servicio técnico oficial de la compañía en Aragón, aunque también han proliferado en la ciudad del Ebro un "mercado gris" de negocios que reparan alguno de estos productos sin garantías y con piezas piratas.

Otro de los nichos del universo Apple donde están tratando de introducirse empresas aragonesas es de las aplicaciones (llamadas app). Este es el caso de la firma Unboring, que ha desarrollado el juego Blupt para la plataforma de la manzana, mientras que TB-Solutions ha creado el programa de banca electrónica de Caixa Penedes para iPhone. Eissound, también aragonesa, se ha especializado en crear accesorios sonoros compatibles con esta gama de productos electrónicos.

La vinculación de Apple con Aragón dará un nuevo impulso con la apertura en Zaragoza de una tienda propia de la compañía (Apple Store). No hay confirmación oficial por parte de la multinacional, fiel a su hermética política de comunicación, pero quienes se mueven en el entorno de la firma en la comunidad dan por hecha su instalación en un parque comercial de la periferia de la ciudad. Todo se verá.