Los comercios aragoneses han mejorado la información sobre los precios establecidos en la actual campaña de rebajas, con tan sólo un 6,13 por ciento de establecimientos que no cumplían con la obligatoriedad de mostrar el doble precio en sus escaparates.
Según informa el Ejecutivo regional, esta es una de las principales conclusiones extraídas de las visitas llevadas a cabo por inspectores del departamento de Consumo desde el inicio de la actual temporada de rebajas.
Los datos que avalan esta conclusión se derivan del porcentaje de establecimientos comerciales que no cumplían con la normativa del doble precio, que en enero del año pasado se situaba en un 9,69 por ciento del total.
El porcentaje se reduce aún más en lo que se refiere al doble precio en el interior, ya que mientras que en la anterior campaña no había doble precio en el 9,97 por ciento de los comercios revisados, en las inspecciones de este año solo se ha detectado este problema en el 1,64 por ciento de los casos.
El director general de Protección de Consumidores y Usuarios, Pablo Martínez, atribuye esta mejora a las sucesivas inspecciones que se han llevado a cabo por parte del Gobierno de Aragón en las últimas campañas de rebajas.
Otra conclusión derivada de la labor de inspección realizada es que la información sobre los precios es mejor en el interior que en el exterior de los establecimientos.
En el informe de Consumo también se señala que un 71 por ciento de los establecimientos en rebajas admiten devoluciones a pesar de no ser obligatorio y que otro 6 por ciento reducen las condiciones de venta respecto al periodo habitual.
Además, mientras que un 54 por ciento de los comercios optan por las rebajas, otro 22 por ciento se decanta por otras fórmulas como son las promociones o las ofertas.
En los primeros días de rebajas de enero, los inspectores de Consumo del Gobierno de Aragón han visitado 895 establecimientos de las tres provincias aragonesas, 201 en la de Huesca; 159, en la de Teruel, y 535 en la de Zaragoza.
Pablo Martínez ha recomendado a los consumidores hacer una lista previa con los productos realmente necesarios y guardar las facturas de compra para poder hacer reclamaciones posteriores.
Asimismo, ha advertido que la publicidad que distribuyen los comercios en época de rebajas es vinculante y que por lo tanto deben cumplir las condiciones y precios que allí se recogen.
