El salario medio anual por trabajador disminuyó en 2020 en Aragón hasta los 21.772 euros brutos al año, lo que supone el peor registro desde el 2017, según la Encuesta Anual de Coste Laboral publicada por este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La cifra en la comunidad está por debajo incluso de la media nacional (22.837,59 euros brutos al mes). Este retroceso se debe a las medidas adoptadas para hacer frente a la pandemia y que incluyeron la puesta en marcha de expedientes de regulación temporal de empleo (erte) entre algunos trabajadores que seguían perteneciendo a las plantillas de sus empresas pero que eran remunerados total o parcialmente con prestaciones del SEPE. De esta forma, la masa salarial percibida no guardó relación con el número de empleados, por lo que para el INE el salario medio está «distorsionado» y su comparación con 2019 no es «apropiada».

Con todo, el coste salarial supone el 73,3 % del coste total por trabajador en el que incurren las empresas, que se situó en los 31.150,220 euros brutos mensuales tras disminuir un 2,1 %, tras tres años de incrementos. Así, el coste neto fue de 30.965,76 euros por trabajador, una vez deducidos 184,44 euros en concepto de subvenciones y deducciones recibidas de las Administraciones Públicas para fomentar el empleo y la formación profesional. En el caso de Aragón, el coste neto fue de 29.626 euros, lo que supone un retroceso del 3,2% uno de los mayores en toda España solo por detrás de Cataluña, Canarias y Baleares.

Los salarios más elevados en Aragón son los del sector industrial, con 24.676, aunque se trata de unos 2.500 menos que el año anterior (27.165) por el efecto de los ertes. Le sigue la construcción, con 24.143 euros y los servicios con 20.725 frente a los 21.221 del 2019, según el INE. El coste total bruto alcanzó los 34.284 euros en el sector de la industria, lo que contrasta con los 28.183 del sector terciario.

En España

El INE ha destacado que este descenso se da tras tres años de crecimiento y ha explicado que en 2020 convivieron trabajadores remunerados con salarios y otros (en ERTE) con prestaciones del SEPE, por lo que la masa salarial percibida no guardó relación con el número de empleados, ya que aunque solo una parte de ellos recibieron rentas salariales, todos estuvieron dados de alta en las plantillas. El salario medio está "distorsionado" y su comparación con 2019 no es "apropiada", según el INE.

Respecto a los costes no salariales, las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social fueron la partida más importante (7.335,87 euros por trabajador, un 23,6% del coste laboral)

Los sueldos y salarios más las cotizaciones a la Seguridad Social constituyeron conjuntamente, por tanto, el 96,9% del coste bruto.

Además de los salarios y cotizaciones, 561,45 euros anuales se destinaron a beneficios sociales por trabajador (cotizaciones voluntarias a seguros y planes de pensiones, prestaciones complementarias a la Seguridad Social y gastos de carácter social), 206,27 a otros gastos derivados del trabajo (indemnizaciones por fin de contrato, pequeño utillaje y ropa de trabajo, transporte hasta el lugar de trabajo o selección de personal), 153,45 euros correspondieron a indemnizaciones por despido y 55,57 a formación profesional.

Asimismo, el coste laboral por trabajador en términos brutos fue de 31.150,20 euros en 2020, lo que representa un descenso del 2,1% respecto al año anterior.

Si se restan las subvenciones y deducciones que se recibieron de las administraciones públicas, se obtiene un coste neto de 30.965,76 euros, con un descenso anual del 2,1%.

Según la encuesta, la industria tuvo en 2020 el mayor coste total neto por trabajador, con 36.771,48 euros, aunque coste se cayó un 2,8% respecto al año anterior, con descensos del 3,7% en el coste salarial y del 0,2% en el coste no salarial.

En el sector de la construcción el coste neto descendió un 0,9%, debido al descenso tanto del coste no salarial (-1,2%) como de los costes salariales (-0,8%).

El sector servicios, por su parte, presentó los costes laborales más bajos en 2020, y registró un descenso del coste neto del 2%, con bajadas del 2,5% en el coste salarial y del 0,7% en el no salarial.

Los costes laborales más elevados se dieron en la Comunidad de Madrid (37.124,53 euros), País Vasco (36.867,25) y Comunidad Foral de Navarra (34.508,28), mientras que los más bajos se observaron en Canarias (24.062,13 euros), Extremadura (25.051,16) y Baleares (27.003,07 euros).

Por otro lado, la mayor parte de los centros, el 94,7%, que correspondieron al 86% de los trabajadores, estuvieron regulados por convenios colectivos en 2020, siendo el ámbito con mayor proporción el inferior al estatal.

Del total de trabajadores con convenio, un 3,3% vieron modificadas sus condiciones de trabajo respecto a lo que se establecía en el convenio colectivo de referencia.