Relevo en el liderazgo del sector eléctrico español. Iberdrola confirma el ‘sorpasso’ histórico sobre Endesa como mayor compañía por número de clientes y adelanta a su archirrival en plena crisis energética, con los precios del mercado eléctrico desbocados y con la sacudida provocada por nuevos competidores en un negocio tradicionalmente controlado por las grandes eléctricas.

Iberdrola cerró el año con 9,985 millones de clientes eléctricos en España y arrebata el histórico primer puesto de Endesa, que completó el ejercicio con 9,792 millones de contratos en el mercado nacional, según los informes anuales hechos públicos por ambos grupos Se confirma un cambio en lo más alto del ránking que se ha venido gestando durante la segunda mitad de 2021 en mitad del caos de precios.

Las dos grandes eléctricas pierden clientes en 2021 -pero una mucho más que otra- y las dos quedan por primera vez por debajo de la cota psicológica de los 10 millones de usuarios. Iberdrola perdió 28.000 clientes en un año, mientras Endesa se dejó 220.000 clientes de luz. La otra gran eléctrica, Naturgy, también sufrió un fuerte descenso del número de clientes, con 190.000 menos, hasta un total de 3,91 millones, según confirman fuentes de la compañía.

La pujanza de un batallón de nuevas eléctricas independientes y la aparición de rivales de peso con ganas de crecer les está costando una sangría en su cartera de clientes a las grandes compañías eléctricas. Los tres grandes grupos energéticos pierden conjuntamente 438.000 clientes de luz el año pasado y confirman la tendencia de los últimos años, con dos millones de usuarios en un lustro.

A pesar de la pérdida continua de consumidores en los últimos ejercicios, Iberdrola, Endesa y Naturgy siguen controlando un 80% de todos los consumidores eléctricos españoles, sumando tanto los hogares que tienen contratada la tarifa regulada (el denominado como PVPC) como los clientes con tarifas del mercado libre.

Nuevos rivales

La entrada de nuevos actores ha sacudido en los últimos años el mercado eléctrico español. El desembarco de petroleras reconvertidas en grupos multienergía está consiguiendo aupar a eléctricas cuya expansión parecía estancada. Repsol anunció la compra de activos de Viesgo en junio de 2018. Entonces la eléctrica cantábrica contaba con menos de 660.000 clientes eléctricos y ahora se sitúa en torno al millón de contratos de luz (la compañía no desagrega sus datos de clientes eléctricos y de gas, y entre ambos mercado suma más de 1,3 millones de usuarios).

La petrolera francesa Total, por su parte, también entró en el mercado eléctrico español a finales de 2020 con la compra de los activos de EDP. La eléctrica, con algún altibajo en algunos ejercicios, ha conseguido mantenerse estable en el entorno de los 1,1 millones de clientes eléctricos en el último lustro. Total Energies pretende impulsar el crecimiento del grupo.

Además de las grandes, hay otro batallón de pequeñas energéticas en el mercado de la luz. En España operan más de 300 comercializadoras eléctricas. Algunas de estas compañías apenas tienen actividad, pero un puñado de eléctricas independientes (no integradas en los grandes grupos verticales energéticas) sí han conseguido ir ganando fuerza. Tanto como para sumar ya entre todas superar los 3 millones de clientes, cuatro veces más en menos de una década. Compañías como Feníe, CIDE, Audax, Holaluz o Aldro han mostrado su fortaleza y acumulan entre 200.000 y 400.000 clientes eléctricos cada una de ellas.