La apuesta de la compañía valenciana Mercadona por los productos frescos y, concretamente, por la fruta y verdura de proximidad, provoca que la empresa tenga previsto comprar más de 6.000 toneladas de cereza de origen español en esta temporada, que va de mayo a agosto. Unas cifras que supondrían el doble de la cantidad adquirida en la campaña anterior. Esa apuesta por los productos nacionales también da sus frutos en Aragón, comunidad en la que la cadena de supermercados ha comprado 1.720 toneladas de esta fruta.

La compañía, según informó en un comunicado, únicamente adquiere cereza de origen nacional y colabora con diferentes proveedores nacionales que se encargan de la distribución de esta fruta. Así, Campo y Tierra y Agrupación Cooperativas Valle del Jerte, de Cáceres; Cherry Fresh, de Murcia; Molina y Azorín y Catafruit Villena, de Alicante; Cerima, de Tarragona; Frutas Espax y Frutaria, de Lleida, son algunos de los socios de Mercadona en el territorio nacional, mientras que Interlázaro y SAT Vidrio de Zaragoza, y Summerfruit, de Huesca, son los partners a los que la empresa valenciana encarga habitualmente sus pedidos de cerezas. De Aragón la compañía ha adquirido por el momento, a través de los proveedores citados anteriormente, 1.720 toneladas de cerezas.

Mercadona apoya la iniciativa del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), Frutas y Verduras de temporada. Asimismo, defiende las prácticas comerciales justas y desde hace años está adherida al Código de Buenas Prácticas Mercantiles en la Contratación Alimentaria. Este acuerdo voluntario, que supone un nuevo paso en la promoción de prácticas comerciales justas, se enmarca en la Ley de Medidas para Mejorar el Funcionamiento de la Cadena Alimentaria y está impulsado por el MAPA en colaboración con distintas asociaciones de toda la cadena agroalimentaria nacional.

Los efectos del temporal

Las cifras macroeconómicas del sector agroalimentario aragonés correspondientes a la anualidad de 2020, presentadas hace unas semanas por el consejero de Agricultura, Joaquín Olona, revelaron que el año pasado la cereza se cultivó en 9.000 hectáreas repartidas por toda la comunidad. Sin embargo, las recientes lluvias y las fuertes tormentas han lastrado la producción de este año, a la espera de conocer los datos de la campaña que se encuentra en ejecución en estos momentos. Hace unas semanas, productores de esta fruta confirmaban que la cosecha de este año sería "floja". De hecho, hay agricultores en la comarca de la Hoya de Huesca que debido al temporal se quedaron sin "nada". Según informaron desde Frutos Orgánicos Naturales S. L., una empresa ubicada en Bolea y propietaria de la marca Cerezas Celi, las pérdidas rondarán entre el 40 y el 80% de la producción.

Por otro lado, las previsiones de la campaña de la fruta de UAGA publicadas este mes, informaron de que se recogerán 35.000 toneladas de cereza. Al igual que sucede con la zona de la Hoya de Huesca, las previsiones se frenaron en el Bajo Cinca y Caspe debido a las lluvias. Desde UAGA señalaron que los productores esperaban un “cosechón” pero, primero las heladas y después el agua caída (que ha rajado el fruto), han hecho que las pérdidas ronden, según las zonas, entre un 40 y un 80%. Si bien, en lo que respecta a la cereza de media estación y tardana se espera una buena cosecha.