Durante la semana del 3 al 9 de abril, tuvo lugar en el IES La Azucarera de Zaragoza un nuevo encuentro del programa Erasmus + Adapt your future acerca del cambio climático. A nuestro centro vinieron alumnos de otros países (concretamente de Francia, Holanda e Italia), que se alojaron en casa de varios estudiantes de nuestro instituto con el fin de pasar una semana conociendo Zaragoza y practicando inglés.
Fuimos aproximadamente 20 estudiantes, entre 3º y 4º de ESO y 1º de Bachillerato, los que participamos en este proyecto. Aparte de conocer a gente maravillosa y crear nuevos lazos de amistad, hemos aprendido nuevos conocimientos sobre todo lo que tiene que ver con el medio ambiente y la naturaleza de nuestra ciudad, Zaragoza.
Contamos con charlas y conferencias de varias personas como, por ejemplo, de Sergio Vicente del IPE o Francisco Pellicer de la Universidad de Zaragoza, entre otras, que consiguieron explicarnos de manera muy dinámica los conceptos sobre la sequía, las inundaciones y otros problemas medioambientales de hoy en día.
De ruta por Zaragoza y el valle del Aragón
Durante los seis días que duró la visita de nuestros compañeros europeos, pudimos mostrarles gran parte de la ciudad, comenzando por nuestro propio instituto, los monumentos inexcusables símbolos de Zaragoza como la Basílica del Pilar, la Catedral de la Seo, la sede del Gobierno de Aragón y el Palacio de la Aljafería, e incluso pudimos realizar una visita a la Torre del Agua, que abrió sus puertas exclusivamente para nosotros. El objetivo de estas visitas era conseguir que los estudiantes extranjeros se marcharan con una idea amplia y acertada de nuestro patrimonio cultural.
También la climatología se puso de nuestra parte ofreciéndonos un espectacular día en el valle del Aragón a donde acudimos para que conocieran Bescós de la Garcipollera, Aratorés, Caniás, Biescas, y la capital de la Jacetania, Jaca. En estas paradas nos explicaban de forma entretenida los problemas que habían ocurrido en cada uno de estos lugares.
Italianos, holandeses, franceses y españoles disfrutamos de un día de camaradería donde pudimos conocernos mejor y aprender de las culturas de los diversos países (por ejemplo, bailes típicos) aprovechando las praderas de La Ciudadela para comer y charlar animadamente.
Conocimientos, cultura y amistad
Finalmente, de despedida final, el viernes por la tarde organizamos una pequeña fiesta en el instituto con picoteo donde vimos las fotos de la semana, un vídeo realizado por un compañero del instituto y nos terminamos de despedir con alguna lágrima de los amigos que hicimos esa semana y con la esperanza de poder verlos de nuevo.
Para concluir, nos gustaría añadir que el poder participar en este programa ha sido un placer para todos, y también decir que si alguien tiene la oportunidad de formar parte de Erasmus +, que no lo rechace, porque saldrá con un mejor nivel de inglés, conocimientos aprendidos y más cultura, pero sobre todo, nuevos amigos. Es una experiencia única e inolvidable.
