Los horarios en España, en el punto de mira

Son muchos los factores que influyen en la falta de sueño y descanso de los ciudadanos pero uno de los más importantes y de los que menos se habla son los horarios que tenemos en España. Nuestros horarios están en el punto de mira desde hace ya tiempo. Los españoles somos los europeos que más horas trabajamos y estamos entre los que más tarde acaban de trabajar. 

En algunas empresas, se empieza a trabajar a las 9 de la mañana, se hace una pausa de tres horas para comer, y la actividad se reanuda sobre las 4 de la tarde y se alarga hasta las 7 o las 8. Estos horarios muy habituales en nuestro país no lo son en otros lugares de Europa donde la jornada laboral empieza antes, es continua o con un breve descanso para comer, y los trabajadores se van a su casa entre las 3 y las 5 de la tarde. 

"No tiene sentido alargar tanto el horario de comida. Somos uno de los países de Europa que más personas tiene trabajando a partir de las 7 de la tarde", explica César Martín, presidente de la Asociación para la Racionalización de Horarios en España (ARHOE). Esta organización propone adelantar la jornada laboral en nuestro país para ser más eficientes y compaginarla con el ocio, como sucede en el resto de Europa.

"Los españoles somos los europeos que más horas estamos en el trabajo y también los menos productivos", indica. Según el presidente de ARHOE adoptar en España la jornada laboral continua de los países europeos, más corta que la española, conllevaría numerosas ventajas. 

Estos horarios son buenos para las empresas, porque aumenta la productividad, reducen costes energéticos y los trabajadores están más satisfechos. También mejoran nuestra calidad de vida al poder conciliar mejor el trabajo con la vida privada, teniendo más tiempo libre.

Los horarios repercuten en la salud mental

"España es campeón de Europa en consumo de ansiolíticos, y en parte es también debido a los horarios", afirma César Martín, que pone el ejemplo de los padres que trabajan, que podrían salir antes a recoger a sus hijos y pasar más tiempo de calidad con ellos, mejorando también el bienestar y la salud mental de los jóvenes.

Para este especialista en recursos humanos, "es obvio que hay sectores donde hacen falta horarios nocturnos como los hospitales, la recepción de un hotel o la recogida de basuras. Pero en otros, como la hostelería o el comercio, no tiene sentido empezar a las 10 de la mañana y acabar como mínimo a las 10 de la noche. Si todos adelantásemos la hora de salir del trabajo, no sería necesario que estas actividades extendieran sus horarios".

Menos horas de sueño, más fracaso escolar

Estos cambios laborales deberían ir acompañados de más medidas, como que las cadenas de televisión adelantaran su prime time y a las 11 de la noche ya hubieran acabado sus programas estrella. La realidad es bien distinta, ya que "en los últimos 25 años, el prime time en España se ha retrasado 72 minutos de media", con programas que acaban de madrugada.

Esto, sumado a otros factores como el "uso inadecuado de la tecnología", hace que nos vayamos muy tarde a la cama. Los estudios indican que dormimos 53 minutos menos que la media europea, y eso tiene consecuencias muy negativas. "Hay más siniestralidad laboral, más fracaso escolar y menos salud en general", señala Martín. 

Los estudios indican que dormimos 53 minutos menos que la media europea

Cambiar las costumbres de un país donde la siesta y la sobremesa son deporte nacional no es fácil y requiere la implicación de toda la sociedad. Para el experto, la clave es "la flexibilidad" y concienciar a la población para que poco a poco sean los ciudadanos los que reclamen a los políticos unos horarios "más racionales y humanos".