¿Me regalas una cabra esta Navidad?

Llega la Navidad y sí, cada año buscamos el mejor regalo para los nuestros. Juguetes para nuestros hijos, libros, unas botas, un bolso... La solidaridad también puede entrar en nuestra lista de deseos en forma de regalos. ¿Y si regaláramos una cabra a nuestra pareja y al mismo tiempo se la hiciéramos llegar a una familia de Guatemala? ¿Y si obsequiáramos con cien desayunos compuestos de un plátano y un huevo a nuestra hermana y al mismo tiempo se los regaláramos a una escuela de Bangladesh?

En Educo, la educación es nuestra prioridad. Creemos en la escuela como motor para la transformación social hacia un mundo más solidario, sostenible y justo. Queremos que las niñas y niños ejerzan y disfruten de su derecho a una educación equitativa, transformadora y de calidad a lo largo de su vida. Pero más de 263 millones de niños y niñas en todo el mundo no van a la escuela.

Queremos que los niños estén más sanos, que vivan en entornos saludables donde se invierta en la prevención y el tratamiento de enfermedades. También que sus familias aumenten sus ingresos y tengan acceso a alimentos adecuados. Pero 156 millones de niños y niñas menores de cinco años sufren retraso en el crecimiento debido a la desnutrición crónica.

No podemos permitir que la falta de recursos impida la escolarización de ningún niño ni ninguna niña. Ni tampoco que se resienta su salud. Esa es la razón de ser de nuestro catálogo de regalos, que llega ya a su cuarta edición con las páginas repletas de regalos realmente necesarios que marcarán la diferencia.

Los regalos forman parte de proyectos más amplios que persiguen mejorar el bienestar de la infancia en los quince países en los que estamos presentes, satisfacen necesidades básicas y ayudan a que se cumplan los derechos a la educación, la salud y la alimentación del casi medio millón de niños y niñas a los que acompañamos en todo el mundo.

Por seis euros podemos comprar un uniforme y ayudaremos a mantener a un niño de Bangladesh en la escuela y a mejorar su autoestima. Por cinco euros mensuales podemos comprar un pupitre, con lo que las escuelas de Burkina Faso estarán mejor equipadas y los alumnos podrán aprender de forma cómoda y adaptada a sus necesidades.

Una niña de una familia de escasos recursos económicos de Nicaragua recibirá unas gafas con las que mejorará su calidad de vida y sus resultados escolares por 69 euros. Una familia guatemalteca dispondrá de carne y huevos para diversificar la dieta alimentaria de sus hijos y tener un adecuado desarrollo físico y mental si les regalamos dos gallinas y un gallo por 29 euros.

Son regalos que ayudarán a mejorar la calidad de vida de estos niños y niñas en todos los sentidos. Son presentes que cubren necesidades reales de los niños y las niñas que más lo necesitan. Y los hemos escogido, cada uno de ellos, pensando en todas las caritas que podemos hacer sonreír.