Esenciales en la economía social

El Colegio Don Bosco de Zaragoza, la Cooperativa La Veloz y Teresa Soro, que ha sido la gerente de la Fundación Picarral durante más de dos décadas, son los flamantes ganadores de los VII Galardones de la Economía Social de Aragón 2023. Estas distinciones las concede la Cátedra Economía Social y Cooperativas, nacida de la colaboración entre el Gobierno de Aragón y la Universidad de Zaragoza.

La gala “se celebra cada año en una de las provincias aragonesas, y en esta ocasión le correspondía a la de Zaragoza”, comenta Carmen Marcuello, directora de la cátedra, que ejerció de anfitriona en la fiesta. Los premios se entregaron la semana pasada en el en el Aula Magna del Edificio Paraninfo, en un acto que se sirvió también como marco para la presentación del Informe de la Economía Social en Aragón 2021.

Estos galardones reconocen la labor y trayectoria de experiencias y ciudadanos particularmente relevantes dentro de este ámbito económico en la comunidad autónoma. Su objetivo es “destacar y poner en valor el trabajo realizado por personas y organizaciones que han sido y continúan siendo esenciales para comprender la evolución y la situación actual de la economía social aragonesa”, apunta Marcuello.

Respecto de los premiados, la catedrática destaca que el Colegio Don Bosco “es una cooperativa de profesores que va cumplir 40 años con un gran compromiso con la formación, a través de metodologías que favorezcan el aprendizaje cooperativo y el trabajo colaborativo”. Este centro educativo abrió sus puertas en el año 1968 en el zaragozano barrio de La Jota, y en 1988 se trasladó a su ubicación actual, en la calle Alfonso Zapater de la capital aragonesa.

Es un colegio concertado, bilingüe y laico, gestionado por una cooperativa de profesores, que se constituyó en 1988. El hecho de que su profesorado sea el responsable de la gestión del centro supone, según los criterios de quienes conceden el premio, “que la plantilla es estable, comprometida e implicada”. Ofrecen a su alumnado “una enseñanza individualizada” y “conectada con el trabajo por esta región”.

Carmen Marcuello resalta del segundo los galardonados, el Grupo La Veloz, que “cumple 30 años de compromiso, innovación social y capacidad de promover otros emprendimientos cooperativos y de generar redes de colaboración”. Tres décadas después, esta empresa está más que consolidada y cuenta en la actualidad con quince socios trabajadores que realizan sus tareas en dos locales. Su volumen de negocio anual se cifra en 956.000 euros, con unos activos de más de 400.000. Presta servicios a más de 800 clientes al mes, entre particulares, empresas, autónomos y administraciones públicas.

El Grupo La Veloz está integrado por tres unidades estratégicas interrelacionadas entre sí, pero autónomas en la gestión, que son Ecomensajería La Veloz, Recicleta y Nabata Asesoría. Además, lleva a cabo un trabajo de coordinación con el centro especial de empleo Logística Social del grupo Atades de atención a la discapacidad intelectual, desarrollando el proyecto Koiki de reparto sostenible de paquetería.

De la tercera y última premiada, Teresa Soro, Marcuello enfatiza “su trayectoria profesional, su aportación al desarrollo de la economía social en Aragón y su compromiso con los valores de la economía social”. Fue una de las artífices de la creación y consolidación de la Fundación Picarral, una iniciativa de la asociación de vecinos del barrio, pero que enseguida voló sola, con Soro al frente del panel de mandos durante más de veinte años.

Teresa es asimismo presidenta del patronato de la Fundación Integración y Empleo y tesorera en la Asociación Centro Obrero de Formación (CODEF). Participa en la comisión de solidaridad de la Asociación Vecinal Picarral Salvador Allende y en los consejos de administración de las empresas sociales Mapiser y Arapack. Además. Fue nombrada hija predilecta de la ciudad de Zaragoza en 1995 y reconocida con la distinción al Mérito Profesional y Valores Humanos de la Junta Municipal del Rabal en 2011.

Más de 21.000 empleos de calidad

El Informe de la Economía Social en Aragón 2021 muestra que ese año existían 7.492 entidades de economía social, el 8,5% del total de empresas de la comunidad. Facturaron más de 3.500 millones euros y generaron un valor añadido bruto de 659 millones. Pese a la crisis derivada de la pandemia de la covid-19, consiguieron mantener e incluso incrementar los 21.440 puestos de trabajo directos que generaban en 2020, elevándolos hasta los 21.660 de 2021, es decir, el 3,63% del empleo en Aragón.

Carmen Marcuello, coordinadora del informe, junto a Cristina Bernad y Elvira Plana, destaca “la fuerte presencia e implantación” de la economía social en el territorio aragonés y su “creciente contribución a la economía social aragonesa en cuanto a la facturación y al PIB” de la región, del 9,38% en 2021, cuando en 2016 era del 6,85%. Califica de “esencial” su papel en el abordaje de “la desigualdad en la distribución de la renta, la exclusión social, la temporalidad y el empeoramiento de las condiciones laborales” o la igualdad de las mujeres. Estas entidades “promueven el enraizamiento de la economía al territorio, asientan el desarrollo en el ámbito rural, son capaces de generar un empleo de mayor calidad y tienden hacia una mayor paridad”.