El Gobierno de España apoyará con "todos los medios y recursos" al de Ceuta para poder activar en el menor tiempo posible las devoluciones de migrantes infantiles a Marruecos, ha asegurado el presidente de la ciudad autónoma, Juan Jesús Vivas, al término de la reunión que ha mantenido este miércoles con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Vivas ha salido de la cita satisfecho, subrayando la sintonía con su interlocutor en que "el objetivo es retornar a los menores". Y se hará, ha asegurado "de acuerdo con la interpretación que de las leyes hagan los tribunales" para que "los expedientes se activen en el plazo más breve posible".

Juan Jesús Vivas y Pedro Sánchez. José Luis Roca

El dirigente autonómico no ha querido apostar por un plazo determinado para un trabajo que, si espera al fallo judicial, puede demorarse varias semanas. En el plazo influirán también los recursos que tanto el Gobierno de España como el de Ceuta puedan movilizar para cumplir cuanto antes con "los procedimientos que determina el reglamento de la Ley de Extranjería".

Eso implica, afirman fuentes cercanas al ejecutivo autonómico, medios humanos, especialistas que puedan ayudar en la realización de entrevistas personales a los menores, así como una implicación directa de la Fiscalía, que se quejó de no haber recibido información del proceso cuando éste se inició, el pasado día 13, pese a que la Fiscalía General del Estado recibió con un día de antelación al inicio del proceso once listas de quince menores cada una en el aviso de que se iniciaban sus repatriaciones, según ha contado al juzgado de lo Contencioso de Ceuta la Abogacía del Estado.

Esta vez se informará al Ministerio Público de forma más completa, cerrando por esa vía la posibilidad de que apoye o no se oponga a nuevas suspensiones cautelares.

Juan Jesús Vivas ha descargado de responsabilidad al Ministerio del Interior sobre cómo se han hecho las devoluciones. En rueda de prensa tras la reunión en Moncloa, Vivas ha dicho: "Yo conocía el procedimiento que se iba a aplicar. No voy a descartar la responsabilidad en el ministro del Interior ni en la delegada del Gobierno".

Sintonía

Los dos presidentes se han visto a solas en Moncloa. Sánchez había convocado a Vivas este martes, después de que el Juzgado de lo Contencioso 1 de Ceuta prorrogara la suspensión cautelar de la repatriación de nueve menores, que por extensión tiene parado el proceso de devoluciones.

A la salida de la reunión, Vivas ha remachado dos argumentos: uno, que "la solución es el retorno" -descartando de momento el traslado de menores a otros puntos de España- y dos, que "esta es una cuestión de Estado". Por primera vez en declaraciones políticas sobre el caso de los niños inmigrantes de Ceuta no se habla del muy repetido "interés superior del menor", sino de la dimensión de Estado del problema.

Y el problema es una cuestión de tamaño y de medios, y no solo de Derecho. Vivas lo ha explicado con cifras: "Ceuta tiene 20 kilómetros cuadrados y 85.000 habitantes. El 0,18% de la población española acoge al 10% de los menores no acompañados que hay en España". Ante esa realidad, "el traslado a la península no se ha planteado como opción", ha contado.

El presidente ceutí ha subrayado su agradecimiento al Gobierno de España y la lealtad que reina entre su gobierno y el de Pedro Sánchez. Y ha repetido en varias ocasiones que la situación de los 800 menores que tiene acogidos la ciudad -500 más vagan sin tutela efectiva por las calles- "es insostenible, de absoluta precariedad".