JxCat se ha adelantado al Govern y este mismo sábado interpondrá una denuncia al líder del PP, Pablo Casado, por calumnias, injurias e incitación al odio por sus afirmaciones sobre la enseñanza en Cataluña, entre ellas que "hay profesores con instrucciones de no dejar ir al lavabo a niños porque hablan castellano".

Según ha informado el partido, el secretario general de Junts, Jordi Sànchez, acompañado por su secretario de Asuntos Jurídicos, Joaquim Jubert, y el abogado Jordi Pina interpondrá este sábado por la tarde en los juzgados una denuncia contra Casado por los delitos de calumnias, injurias e incitación al odio.

De esta forma, Junts se adelanta al Govern, del que forma parte, después de que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha anunciado este sábado por la mañana que los servicios jurídicos de la Generalitat estudian presentar una querella contra Casado por sus afirmaciones sobre el catalán en la escuela, en plena polémica por la sentencia para que se imparta el 25 % de las clases en castellano.

Casado afirmó este viernes en un acto en Galicia que en Cataluña "hay profesores con instrucciones de no dejar ir al lavabo a niños porque hablan castellano", que "a los hijos de los policías nacionales y guardias civiles se les señala en clase y se dice que no pueden estar integrados" y que hay niños a los que se les pone "piedras en la mochila" por hablar castellano en el patio.

Aragonès ha anunciado hoy que los servicios jurídicos de la Generalitat están estudiando "estas declaraciones infames". "Defenderemos siempre la verdad y al profesorado de ataques indecentes como este", ha prometido el presidente catalán.

Unas 35.000 personas han participado este sábado en Barcelona en la convocatoria de la plataforma educativa Somescola para defender la inmersión lingüística y el modelo de escuela catalana tras las últimas sentencias judiciales sobre el 25 % del castellano en las clases.

"Callar, silenciar y amedrentar"

Por otro lado, la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha acusado al Gobierno de participar en una manifestación "infame" que busca "callar, silenciar y amedrentar a las familias que quieren ejercer sus derechos", y ha denunciado que en Cataluña "hay odio" y se practica "una persecución institucional".

La máxima dirigente de Ciudadanos se ha pronunciado así este sábado en referencia a la manifestación que ha llenado este sábado el centro de Barcelona.

"Es inaudito que miembros del Gobierno de Sánchez estén en una manifestación que busca callar, silenciar y amedrentar a todas las familias que quieren cumplir sus derechos y tener el español también como lengua vehicular en la escuela", ha dicho, en declaraciones a los periodistas.

La también presidenta del grupo de Ciudadanos en el Congreso ha calificado de "infame" la manifestación porque "intenta silenciar a más de media Cataluña", y ha criticado también con dureza la asistencia a la misma de los sindicatos.

Así, ha señalado que "los sindicalistas, que no mueven ni un dedo para luchar contra los barracones, contra la subida de la luz o la precariedad laboral, hoy están aquí tocando las palmas al nacionalismo más identitario y más elitista y sectario de Europa que es el Govern".

También ha sido crítica con el plan del Govern de enviar a inspectores del departamento de Educación a garantizar el cumplimiento de los planes lingüísticos de las escuelas, y los ha calificado de "inquisidores lingüísticos".

Tras denunciar que esta medida es "ilegal e inmoral", Arrimadas ha afirmado que "en Cataluña hay odio y persecución institucionalizada a una mayoría de catalanes que queremos la convivencia y dos lenguas vehiculares en la escuela".

Arrimadas ha participado en Barcelona en una reunión de dirigentes de Ciudadanos con miembros de una docena de asociaciones civiles que defienden el castellano, un encuentro que se ha celebrado en paralelo a la manifestación del centro de la ciudad.

"Estas entidades nos han constatado que hay una especie de revulsivo, que en las últimas semanas se están produciendo cambios. Y se nota un aumento de las familias que están perdiendo el miedo a significarse y quieren reivindicar sus derechos", ha dicho.

En su opinión, estamos ante "un despertar de muchas familias", tras "el punto de inflexión" que ha supuesto el caso de un escolar de Canet de Mar (Barcelona), que se ha convertido en "una semilla de libertad".