Comunidad de Madrid

Ayuso elabora una Ley de familia para dotar de más autonomía a los padres en la educación de sus hijos

El periodo de consulta de este proyecto comenzará antes de finalizar el año y prevé también una especial protección de los derechos de los abuelos a estar con sus nietos

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en la plaza de toros de Las Ventas.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en la plaza de toros de Las Ventas. / EFE

Elena Marín

Isabel Díaz Ayuso se ha caracterizado por dar la batalla cultural de la derecha desde que llegó al poder en 2019 y no dejar que sean otros los que ocupen el espacio mediático y, cuando sus competencias se lo permiten, procura que tampoco el legislativo. Una de sus próximas contiendas será la nueva Ley de protección a la familia en la que trabaja la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, que dirige Ana Dávila, impulsada para preservar el "protagonismo" de las familias en una sociedad en la que, apuntan en este departamento, su papel se va devaluando.

En concreto, esta nueva norma garantizará "el respeto a la libertad y autonomía familiar en la educación de los hijos frente a los poderes públicos, que tendrán carácter subsidiario", señalan en la consejería. Sin embargo, se remiten al carácter incipiente de la norma, aún un borrador que no saldrá a consulta hasta finales de año, para señalar que no hay más detalle sobre qué implica esa "autonomía" y si esta incursión en el ámbito educativo a la que hacen referencia está ligada a lo que se conoce como pin parental, una cuestión asociada hasta ahora a Vox, que exigía que los padres pudieran prohibir que sus hijos participen en actividades escolares ajenas al plan de estudios sobre cuestiones relacionadas principalmente con la identidad de género, la diversidad sexual u otras relacionadas con la igualdad y el feminismo. El objetivo, en cualquier caso, es que las administraciones dejen de ser "intervencionistas" en la vida familiar y solo "acompañen", relatan en el departamento de Dávila.

Si bien los detalles sobre el texto son escasos, sí se anticipa que se busca la fórmula para subrayar el papel de los abuelos como "pilar fundamental del núcleo familiar" y sean así "reconocidos como sujetos de derechos en esta ley". Partiendo de que siempre se buscará el bien superior del menor, la idea del gobierno regional es promover el derecho de los abuelos "a tratar y visitar" a sus nietos y que en casos de conflicto, en los que la patria potestad no pudiera ser ejercida por los padres, los abuelos tengan preferencia.

En un encuentro informativo con los medios, desde la consejería también han apuntado que el fomento de la natalidad continuará siendo uno de sus principales objetivos esta legislatura. En esta línea se comprometen a ampliar las ayudas ya existentes hasta "1.800 euros por hijo nacido, tanto para partos como adopciones múltiples". Junto a las ayudas directas a los progenitores, la Comunidad de Madrid completa su plan con subvenciones a asociaciones que ayudan a las familias. Así, la consejería informa de que ha convocado 1,5 millones de euros en ayudas destinadas "a entidades que ayudan a familias vulnerables, con las que el año pasado se atendió a más de 14.000 personas, entre madres y menores". Estas partidas se destinan a recursos residenciales, gastos de alimentación, acompañamiento o asesoramiento jurídico. La novedad de estas subvenciones, explican, es que ahora "podrán ser beneficiarias también todas las asociaciones que trabajen en apoyo de familias con otras dificultades, como las numerosas, monoparentales o las adoptantes".

En la cruzada abierta contra la soledad no deseada, sobre todo de los mayores, el gobierno regional creará un Cuerpo de Voluntariado Joven de la región, que estará formado por personas de entre 14 y 30 años a quienes se coordinará a través de profesionales del Carné Joven "para acompañar a personas mayores a través de llamadas y visitas a sus domicilios o a las residencias en las que viven". Junto a la compañía y ayuda que los jóvenes puedan ofrecer a los mayores, en la consejería creen que esta relación puede servir para el intercambio de valores y conocimientos en sentido inverso que pueda a su vez ser beneficioso para los más jóvenes. El plan de acción para este equipo de voluntarios contempla programas de ayuda en pequeños municipios o en tiempo de ocio compartido en actividades deportivas y culturales.

Asimismo, las líneas maestras de este departamento para los próximos cuatro años pasa por mejoras en las ayudas a los mayores y dependientes en las residencias, donde después de varias polémicas se están preparando los pliegos para los nuevos contratos de alimentación que saldrán en marzo, o en sus casas con equipos de teleasistencia, y campañas y proyectos para luchar contra las adicciones, especialmente entre los más jóvenes.