El petróleo de referencia en EEUU alcanzó ayer un nuevo máximo histórico al llegar a los 43,92 dólares en la preapertura en Nueva York ante el temor de atentados de Al Qaeda a organismos financieros internacionales. La semana pasada, el crudo ya batió récords en el mercado de Nueva York. En el de Londres, el barril de Brent, de referencia en Europa, llegó a niveles de 40 dólares, no vistos desde la primera guerra del Golfo (1991).

Tres variables han disparado los precios hasta hoy: la demanda imparable de Estados Unidos y de China, el temor a atentados terroristas no sólo en Irak sino también en Arabia Saudí (el primer exportador mundial) y, en los últimos días, la crisis de la petrolera rusa Yukos, puesto que este país es el segundo suministrador mundial de crudo.