Terrorismo

La UE reforzará los controles migratorios ante un eventual aumento de la "radicalización" por la guerra en Israel

Los ministros europeos han acordado extremar los controles migratorios, reforzar la cooperación policial y deportar con rapidez a aquellas personas que suponen un peligro para la seguridad interna

Fernando Grande Marlaska, durante la reunión con sus homólogos de los Veintisiete.

Fernando Grande Marlaska, durante la reunión con sus homólogos de los Veintisiete. / EFE

Silvia Martinez

De Túnez a Italia, pasando por Suecia para regresar de nuevo a Italia y terminar viviendo de forma irregular en Bélgica. El itinerario seguido por Abdessalem Lassooued, el presunto terrorista que esta semana asesinó a dos ciudadanos suecos en el centro de Bruselas y que terminó abatido a tiros por la policía, ha sido puesto como ejemplo este jueves por los ministros de Interior de la Unión Europea de por qué es necesario extremar los controles migratorios, reforzar la cooperación policial y deportar con rapidez a aquellas personas que suponen un peligro para la seguridad interna europea, particularmente ante un eventual aumento de la "radicalización" y la "polarización" tras la escalada que vive el conflicto de Oriente Próximo.

"Este terrorista en Bruselas ha sido un aviso. Un ciudadanos tunecino que llegó a la UE hace 12 años, que ha estado aquí desde 2011, sin derecho a estar en el territorio de la UE, con solicitudes de asilo rechazadas varias veces. Entiendo que no es el momento de echar la culpa a unos y otros pero esto es una señal de alerta", ha admitido la comisaria de Interior, Ylva Johansson, tras la reunión de ministros celebrada en Luxemburgo. "Es indispensable garantizar que la UE esté segura, protegida de amenazas terroristas. Tenemos que tener la certeza de que no tengamos aquí extremismo, antisemitismo violento, islamofobia, que todos nuestros ciudadanos estén seguros y para conseguirlo necesitamos más cooperación policial", ha añadido.

Una cooperación con la que se han comprometido los Veintisiete. "Hemos analizado las implicaciones que el conflicto (en Oriente Próximo) pueda tener en la seguridad interior de la UE. Reforzaremos la seguridad interior mediante una sólida cooperación policial en la UE y con terceros países, que ya existe y es importante", ha explicado el ministro de Interior en funciones español, Fernando Grande-Marlaska. "Hay lugares específicos que pueden necesitar un mayor nivel de protección", ha añadido sin precisar cuáles son esos lugares pero haciendo hincapié en que hacen una evaluación constante de los riesgos.

Evitar la radicalización

Los Veintisiete también ha hablado de la necesidad de luchar contra la radicalización, "y contra aquellos que amparados en la desinformación alimentan los discursos de odio como antisemitismo, islamofobia y racismo". Un problema que, según Bruselas, afecta cada vez a gente más joven. "Hablamos de una franja de edad de 11 a 14 años que es la franja de edad más en riesgo de radicalización y es algo que exige medidas", ha dicho Johannson, que también ha hecho hincapié en la necesidad de acelerar con urgencia la revisión de la directiva de retorno para expulsar a las personas que no tienen derecho a permanecer en territorio europeo, particularmente aquellas que suponen una amenaza para la seguridad.

Aunque la tasa de retornos ha aumentado un 20% este año, el nivel de personas expulsadas respecto al porcentaje de decisiones negativas que se adoptan en la UE sigue siendo muy bajo. "Los Estados miembros tienen que cooperar mejor. No nos podemos permitir tener 27 sistemas diferentes de hacer los retornos. Tenemos que ser más eficientes", ha instado Johannson. "Debe ser una obligación para todos nosotros", ha reconocido el ministro sueco de Interior, Gunnar Strommer, que junto con su homóloga belga, Annelies Verlinden, ha reclamado además más intercambio y cooperación entre las fuerzas de seguridad.

"Observo que tanto en Bélgica como en Francia fueron dos personas de nacionalidad extranjera quienes cometieron estos ataques, por lo que a partir de ahora tenemos que poner en práctica el pacto migratorio que hemos negociado para tomar el control de nuestras fronteras y registrar a las personas. Hagamos las entrevistas de seguridad antes de estudiar cualquier solicitud de asilo", ha valorado el ministro francés de interior, Gérald Darmanin. Según ha anunciado la comisaria Johansson, Bruselas ha pedido al coordinador de retornos europeo que convoque una "reunion extraordinaria" este viernes para debatir con los Estados miembros "cómo garantizar que las personas que revisten un riesgo de seguridad para la UE puedan retornarse con más rapidez a sus países de origen", algo que según dice, "tiene que ser una prioridad".