El fin de nuestra cirugía laparoscópica de la obesidad es garantizar los mejores resultados en el adelgazamiento, la salud y la calidad de vida de los obesos mórbidos. Entendemos resultados en mejora de la calidad de vida el aumento y la mayor satisfacción en la actividad física, laboral, psíquica, social y sexual, donde está plenamente implicada la autoestima personal y estética.

Las preguntas más frecuentes que realizan son ¿qué es la obesidad mórbida, cuál es mi índice de masa corporal, cuándo debo operarme, puedo hacerlo por Laparoscopia, sin abrir el abdomen, en qué consiste esta cirugía, qué ventajas tiene?

Hablamos de obesidad mórbida cuando el peso alcanzado es tal que entraña grave riesgo para la vida de la persona. En estas circunstancias se asocian patologías como: Hipertensión arterial, diabetes, hipercolesterolemia, hiperuricemia, insuficiencia cardiaca, respiratoria, síndrome de Picwick, de apnea-sueño, insuficiencia venosa, varices, insuficiencia articular, artrosis, depresión, alteración de la autoestima, las relaciones sociales y sexuales, incluso cánceres como el de mama.

La obesidad se ha convertido en una enfermedad crónica que supone una disminución de la supervivencia. En términos matemáticos hablamos de obesidad mórbida cuando el índice de masa corporal (IMC) es superior a 40 kg/m2. También existe indicación de cirugía con IMC mayor a 35 con patologías asociadas. Cuando se ha alcanzado una obesidad mórbida, los tratamientos dietéticos con o sin soporte de medicamentos o psicólogos, serán insuficientes. Entonces, solo la cirugía puede garantizar buenos resultados. La indicación de cirugía se hará con IMC superior a 40 o IMC superior a 35 sufriendo además patologías asociadas a la obesidad. La cirugía consiste en practicar la técnica antiobesidad más adecuada a cada paciente, sin abrir el abdomen. Esto requiere una alta especialización técnica y tecnológica, de la cual no disponen todos los cirujanos ni todos los centros. Nosotros trabajamos con unas tijeras armónicas, capaces de cortar y coagular los vasos sanguíneos al tiempo. Los cortes y las uniones las realizamos con sutura mecánica.

Las ventajas son que al hacerse heridas mínimas, sin seccionar ningún músculo ni aponeurosis, el dolor es menor, y la movilización es mayor, mejorando el estado general del paciente, evitando trombosis y embolias, evitando neumonías y complicaciones respiratorias. Todo ello hace que la recuperación sea más rápida. Al ser las incisiones tan pequeñas, la posibilidad de infección casi no existe y las eventraciones, o lo que es lo mismo, las hernias en la herida operatoria, las cuales pueden superar la 40% en la cirugía abierta, no aparecen en la laparoscópica. El trato delicado del intestino, mediante pequeñas pinzas, hace que recupere su movilidad antes, por lo que la ingesta es más precoz y los alimentos se toleran mejor. En resumen, tendremos menos dolor, menos complicaciones tromboencefálicas y pulmonares, menos infecciones o cicatrices, y un mejor resultado estético, tolerancia de alimentos y recuperación.

CLINICA LABENA