La temporada de piscinas en Torres de Berrellén llegó a su fin en el año más difícil desde que el municipio cuenta con estas instalaciones. Dentro de la situación complicada que se ha vivido en la comarca, Torres no se vio tan afectado y no fue necesario su cierre parcial.

Antes de su apertura, el consistorio cumplió con los protocolos establecidos por el Gobierno de Aragón, como la disponibilidad de gel desinfectante en diferentes áreas, toma de temperatura a la entrada, alfombrillas desinfectantes y, sobre todo, la desinfección del recinto dos veces al día.

Este año no se pudo celebrar, como en ocasiones anteriores, una fiesta de fin de temporada en las piscinas, pero desde el consistorio se espera y desea que el verano que viene se pueda volver a disfrutar de las piscinas de una forma más normalizada. T