Ainzón se convirtió el pasado 16 de septiembre en el escenario de la XXXII Fiesta de la Vendimia de la Denominación de Origen Campo de Borja, una cita a la que acudieron el consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, Joaquín Olona; la directora general de Innovación y Promoción Agroalimentaria del Gobierno de Aragón, Carmen Urbano; el diputado delegado del Monasterio de Veruela, Feliciano Tabuenca; la presidenta de la Comarca Campo de Borja, María Eugenia Coloma; y el presidente de la DO Campo de Borja, Eduardo Ibáñez; entre otros diputados de las Cortes y representantes provinciales y locales.
Durante su intervención, el consejero Olona puso en valor la actitud del sector vitivinícola. «Sois un ejemplo de superación de dificultades. El sector del vino tiene una peculiaridad y es su actitud positiva, que además no es incompatible con vuestras reivindicaciones y nuevos proyectos». Olona señaló también su intención de retomar «compromisos pendientes» con esta DO, como la mejora de la sede o el proyecto de garnachas viejas.
ESFUERZO DE LAS FAMILIAS
El diputado provincial Feliciano Tabuenca destacó que «gracias al esfuerzo de las familias de esta zona hemos conseguido el prestigio que hoy tienen estos vinos» y recordó que el Museo del Vino del Monasterio de Veruela celebra 28 años «en los que nos sentimos orgullosos de ayudar a dinamizar el turismo enológico en la zona». El diputado señaló también el compromiso de la Diputación de Zaragoza con la regeneración y recuperación de las localidades afectadas por el incendio que asoló la zona del Moncayo el pasado mes de agosto.
Por su parte, el presidente de la denominación de origen, Eduardo Ibáñez, puso de relieve que la uva está entrando a las bodegas con una buena salud, ya que las plagas no han afectado a la los viñedos. También aprovechó la ocasión para recordar que «en estos momentos, el futuro es incierto para el sector y por eso necesitamos el apoyo de las administraciones en nuestros canales comerciales y nuestros proyectos».
La celebración comenzó con la imposición de la banda a la reina de la vendimia, quien, muy emocionada, deseó una feliz fiesta a todos los asistentes y una buena cosecha a todos los viticultores de la DO. Acompañados de la banda de música municipal, los representantes de la DO, junto a las autoridades locales y la comitiva de reinas se desplazaron hasta la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Piedad, donde se celebró una misa baturra cantada por el grupo de jota Fuendejalón.
Tras la eucaristía, los asistentes se trasladaron hasta el pabellón municipal donde tuvo lugar el pisado de las primeras uvas. Un grupo de niños procedentes de cada una de las 18 localidades que integran la Denominación de Origen Campo de Borja fueron los encargados de llenar la cuba en las que las pisadoras de esta edición, las jóvenes Carmen Gracia y Raquel Ferrer, obtuvieron el primer mosto de la temporada.
Terminado el acto de exaltación del vino, el Ayuntamiento de Ainzón ofreció un aperitivo, maridado, por supuesto, con los vinos de la DO. Después, el Consejo Regulador ofreció a sus invitados un almuerzo en el Monasterio de Veruela, sede del Museo del Vino de la Denominación de Origen.
OBRAS DE AMPLIACIÓN DE LA SEDE
Aprovechando que la Fiesta de la Vendimia se celebraba en la localidad de Ainzón, el consejero Joaquín Olona visitó las obras de ampliación de la sede que comenzaron la semana anterior. Está previsto que este nuevo espacio sirva para dar difusión al proyecto Garnachas Históricas, una iniciativa pionera en Europa para proteger los viñedos viejos de garnacha de Borja y de todo Aragón.
