El servicio de bookcrossing se está demorando en su puesta en marcha

Desde hace unos meses, la Junta Municipal de Casablanca trabaja para poner en marcha un servicio de bookcrossing -intercamio gratuito de libros- en el distrito. Un proyecto "que se está demorando mucho", explica la presidenta de la junta, Leticia Crespo, pero que queremos poner en marcha en primavera. Para conocer en que estado está su tramitación, "hemos solicitado a Servicio Públicos del Ayuntamiento de Zaragoza información al respecto", precisa la edil. Fue en el último pleno celebrado en el distrito el pasado 23 de enero y ahora están esperando respuesta.

Mientras, el proyecto está totalmente definido. Así, Las estanterías para los intercambios se colocarán en diferentes puntos del distrito, concretamente, tres en Valdespartera, dos en Rosales del Canal, otras dos en Montecanal, dos en Casablanca Histórico y una en Santa Fe. En total, diez. Posteriormente, "este servicio también llegará hasta Arcosur", puntualiza Crespo.

Para estrenar el nuevo servicio de book crossing (intercambio gratuito de libros) en el distrito, el pasado 27 de abril se realizó una actividad en la que se involucraron las Ampas de los colegios de la zona, así como las asociaciones de vecinos. El objetivo fue dar color y vida a las casetas que servirán de soporte para guardar los libros. La Junta Municipal de Casablanca ha donado 60 ejemplares para este fin, que estarán identificados con una pegatina en la que el libro estará perfectamente catalogado con un número que permite hacer un seguimiento del mismo a través de la página web:www.BookCrossing.com.

Gracias a este código se puede saber "donde ha estado el libro, quién lo ha leído, y otros aspectos curiosos de este tipo de intercambio de cultura que es gratuito. Con este modo de intercambio hay veces que los libros viajan por todo el mundo, dado que es un método estandarizado que funciona igual en todos los países", explica la presidenta de la junta, Leticia Crespo.

Bookcrossing es la práctica de dejar libros en lugares públicos para que los recojan otros lectores, que después harán lo mismo. La idea es liberar libros para que sean encontrados por otras personas que, tras leerlos, deben volver a dejarlos en su sitio para que otras personas puedan disfrutar de su lectura.

BIBLIOTECA

Los vecinos de Valdespartera tendrán que seguir esperando para contar con una biblioteca en su barrio, un servicio que se ubicará en la calle Ciudadano Kane. Pese a que el consejero de Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza, Jerónimo Blasco, había prometido el pasado otoño que este equipamiento abriría en enero del 2014, pero terminando el mes todavía no hay fecha de apertura. No obstante, fuentes municipales aseguraron que la biblioteca abrirá "antes del verano".

Este aplazamiento, así como la falta de información sobre las razones por las que no se podrá abrir en la fecha prometida no han sentado nada bien en el barrio, que no dispone de ninguna instalación cultural de este tipo, ni pública ni privada.

"A nosotros no nos han comunicado nada acerca de los motivos por los que se retrasa la apertura de la biblioteca", protestó ayer Yolanda Ibáñez, presidenta de la Asociación de Vecinos Los Montes de Valdespartera. La representante vecinal destacó que "ni siquiera se han adjudicado todavía las obras".

Desde el Ayuntamiento de Zaragoza tampoco ofrecen ninguna razón para explicar la demora. Pero aseguran que el proyecto técnico de las obras que el local necesita para su conversión en biblioteca ya está concluido, será aprobado en la próxima reunión del consejo de Zaragoza Vivienda.

Una vez finalizado este trámite, la sociedad municipal cederá el local para su gestión al patronato de Educación y Bibliotecas, que también se encargará de su equipamiento, dotándolo de mobiliario y material bibliográfico.

BARRACÓN

Otro de los equipamientos que también suscita interés en el barrio es el barracón de las antiguas oficinas de la UTE del tranvía, que también está sufriendo retrasos en su apertura. Los vecinos también esperan que se remodele para convertirse en un centro de usos polivalentes para las entidades ciudadanas de los barrios del sur de Zaragoza.

Su puesta en marcha había sido anunciada para principios de año. Después, según Yolanda Ibáñez, "se nos dijo que sería en abril. Pero viendo lo que ha ocurrido con la biblioteca ya no nos lo creemos", aseguró la militante vecinal.