CULTURA Y OCIO

El festival EnClaves llena la comarca de música clásica

La voz ha sido protagonista en iglesias y ermitas de los pueblos de la Hoya

La Colegiata de Bolea se llenó para escuchar el concierto dirigido por la soprano oscense Mariángel Leo. | SERVICIO ESPECIAL

La Colegiata de Bolea se llenó para escuchar el concierto dirigido por la soprano oscense Mariángel Leo. | SERVICIO ESPECIAL / la crónica cronicas@aragon.elperiodico.com

La Crónica

El Festival de Música y Patrimonio EnClaves, organizado por la Comarca de la Hoya de Huesca, es una de las citas de referencia en el Alto Aragón para los amantes de la música clásica. Este verano celebró su 10ª edición con una programación de ocho conciertos en ocho escenarios únicos como la iglesia del Salvador de Agüero o el Palacio de los Urriés de Ayerbe. EnClaves basa su propuesta en la combinación de música clásica y patrimonio.

Buen ejemplo de llo fueron las voces femeninas fue la gran protagonista del concierto programado en la Colegiata de Bolea. Bajo la dirección de Mariángel Leo se desarrolló una actuación rica en matices y diversa en formaciones, concebida bajo el espíritu del subprograma Factoría EnClaves que promueve la producción de espectáculos novedosos desarrollados por artistas altoaragoneses.

En torno a la figura de la soprano oscense Mariángel Leo se articuló un concierto en el que se distinguieron dos partes. En la primera, se estrenaba el grupo de voces blancas Almavokal, ocho destacadas intérpretes femeninas del panorama altoaragonés que, aunque exploraron el reportorio del siglo XVI, centraron el núcleo de su programa en atractivas y exigentes piezas contemporáneas de autores como Gabriel Fauré, Julio Domínguez, Ola Gjeilo y, sobre todo, la muy aplaudida Dirait-on del compositor estadounidense Morten Lauridsen.

El piano de Valeria Vagánova había acompañado varias de las obras de Almavokal, aunque fue en su interpretación del nocturno de Chopin donde mejor se observó su extraordinaria calidad. Su actuación, además de enriquecer la variedad de registros del concierto, sirvió para transitar con naturalidad y coherencia hasta una segunda parte donde las voces de Mariángel Leo y Pilar Marqués fueron las encargadas, a dúo o como solistas, de tejer un repertorio de los siglos XVI al XVIII con composiciones de Claudio Monteverdi, Georg Friedrich Händel y Wolfgang Amadeus Mozart. La soprano zaragozana Pilar Marqués hizo alarde de su habilidad vocal para trazar con maestría piezas muy aplaudidas. También Mariángel Leo hizo gala de su potencia y de su cuidada técnica en varias obras de Monteverdi, aunque lo más celebrado fueron sus dúos, especialmente el Caro, bella de Händel con el que cerraban su gran actuación.

El concierto acabó con una larga ovación que ofrecieron las trescientas personas que se dieron cita en la jornada y que llenaron la Colegiata de Bolea.