Las brigadas que trabajaron en Liesia se encontraron con un incendio "muy irregular" que fue atajado con cortafuegos distribuidos gracias a los planos de visión aérea de la zona. La presencia de caminos forestales facilitó la tarea, que se centró en cortar bosque y abrir camino mediante unos camiones para facilitar el acceso posterior de los Bomberos, que acudieron con vehículos todoterreno hasta el monte. Estos equipos trabajaron con mangueras, refrescando árboles y matorrales no afectados por las llamas, y utensilios manuales de extinción. "No tenemos horario, pero realizamos turnos de más de doce horas. Si tu turno finaliza y estás en medio de un fuego, ¿cómo te vas a ir?", contestaba un bombero en un momento de descanso. Y es que el fuego, como elemento natural que es, tiene un comportamiento impredecible.