El futuro hospital de Teruel se ha enfrentado a más riesgos de los realmente existentes, al margen de las dificultades de financiación. A fines del pasado verano, la Diputación General de Aragón dio orden de aplazar la construcción del edificio a raíz de un informe de la Universidad de Zaragoza que señalaba que la zona elegida, conocida como El Planizar, presentaba riesgo sísmico. A este informe siguió otro que reconocía este peligro pero consideraba que se trataba de un paraje adecuado para la construcción del centro sanitario. Eso sí, la rectificación supondrá que la obra se encarecerá bastante debido a la instalación de costosos sistemas antisísmicos. Sin embargo, ahora, el mapa de riesgo sísmico de Aragón, dado a conocer ayer, no destaca Teruel ciudad y su entorno como especialmente propenso a los terremotos, un peligro que sí afecta a amplias zonas del Pirineo. Además, la oposición criticó el parón del proyecto del hospital por considerar que el supuesto riesgo sísmico ocultaba una falta de voluntad de llevarlo a cabo.