MUJER Y DEPORTE

Clara Martínez de Salinas, nadando por un sueño

La nadadora zaragozana de El Olivar acaba de cosechar sus dos primeras medallas a nivel europeo, con un oro y una plata que agrandan su ya extenso palmarés pese a tener 16 años. Comenzó cuando tenía 3 y ya piensa en ganar a nivel mundial y en los JJOO de 2028

Clara Martínez de Salinas posa con sus medallas del Campeonato de Europa de aguas abiertas en la piscina de El Olivar.

Clara Martínez de Salinas posa con sus medallas del Campeonato de Europa de aguas abiertas en la piscina de El Olivar. / Jaime Galindo

David García Arlegui

David García Arlegui

Ni hay mar alguno en Aragón ni falta que le hizo a Clara Martínez de Salinas para regresar del Campeonato de Europa júnior de aguas abiertas de la ciudad griega de Corfú con dos medallas, una de oro y una de plata, en la primera ocasión que esta joven nadadora zaragozana tuvo de participar en un evento de tal magnitud. «Solo pensaba en que había cumplido un sueño porque no me lo esperaba. Fue como conseguir algo con lo que sueñas cuando duermes, nunca te lo imaginas», confiesa Clara al recordar qué sintió al subirse al podio en Grecia como subcampeona de Europa júnior en los 7,5 kilómetros

No sería su única conquista, ya que, si el jueves de la pasada semana se alzaba con la plata, el domingo volvía a tocar la gloria, con mayúsculas, consiguiendo la medalla de oro con el combinado nacional en el relevo mixto de 4x1.250 metros. «Mi compañera se tiró al agua primero y sacó ventaja, y yo fui capaz de ganar algo más. Fuimos rápido y pensando solamente en que no nos iban a adelantar», rememora la aragonesa. «Estaba nerviosa, pero con muchas ganas. Me vi bien y al terminar no me lo creía», comenta Clara, cuyo verdadero premio le llegó al retornar a su Zaragoza natal.

«He recibido muchas felicitaciones y estoy muy contenta porque todo el trabajo haya salido bien. Mis padres y mis hermanos me recibieron en la Estación de Delicias. Me emocioné», relata una adolescente cuya progresión va creciendo de forma exponencial, tanto que ha obtenido dos medallas a nivel continental en una superficie, el mar abierto, para la que no se había preparado hasta este mismo verano. «Me fui durante todo el mes de agosto al Centro de Alto Rendimiento de Sierra Nevada a practicar con altura para entrenar todo el tema del oxígeno», cuenta. «Entrené con la selección española durante 20 días muy duros, pero pudimos llevarlo bien porque había muy buena compañía», expresa Clara.

«Todo nadador, esté al nivel que esté, siempre tiene el sueño de ir a unos Juegos Olímpicos»

La joven promesa se muestra muy agradecida con Pepín Rivera y Sergi García, seleccionador y responsable de aguas abiertas de la Real Federación Española de Natación, y con un equipo al que considera «como una familia. Nos apoyaban todos y en todo momento. Te dan buena suerte», considera. «Se agradece mucho tener un equipo que sabes que siempre va a estar ahí para todo. Ha sido una experiencia muy bonita que siempre voy a guardar en la retina, como todos los momentos vividos», afirma.

Este Campeonato de Europa, a su temprana edad, ha sido un premio al trabajo de muchos años, desde que comenzase casi cuando todavía no caminaba. «Empecé porque me apuntaron mis padres para que aprendiese a nadar con 3 años», asegura. «En alevines era una más por ahí nadando y, ya en infantiles, gané mi primera medalla en el Campeonato de España en 1.500. Ahí empecé a aparecer un poco, pero hasta que me llamaron de la selección española en febrero de esta temporada no terminé de destacar», confiesa Clara, que añade el Campeonato de España del pasado año en el que obtuvo cinco medallas de oro como un punto a destacar de su corta aunque laureada trayectoria.

«Mis padres eran socios de El Olivar antes de que naciera y llevo nadando ahí desde que empecé. Es una familia para mí porque siempre me han ayudado y han estado ahí. Es un orgullo poder representarlos», indica. «Es como mi segunda familia», incide la nadadora, cuyo anhelo es «ir a unas olimpiadas» porque considera que «todo nadador, esté al nivel que esté, siempre tiene el sueño de ir a unos Juegos Olímpicos». «En el futuro me quiero ver habiendo pasado por unos», explica una ambiciosa Clara Martínez de Salinas, que pone fecha a su sueño. «Mi objetivo en el futuro es ir a Los Ángeles 2028, aunque hasta entonces hay Campeonatos de Europa y Mundiales en los que quiero conseguir medallas», expresa.