Los responsables de Adif han licitado un nuevo contrato para avanzar en el desarrollo de las actuaciones del plan director de la línea entre Zaragoza y Sagunto pasando por Teruel. En concreto, en el nuevo texto se contempla el suministro y transporte de 1.700 toneladas de carril para la renovación de vías entre las estaciones de Cariñena y Sagunto (en la provincia de Valencia), con un presupuesto inicial de 1.748.249,62 euros.
Este contrato comprende las operaciones de fabricación, acopio en fábrica, carga y transporte hasta los puntos de almacenamiento, establecidos en las estaciones de Cariñena, Ferreruela, Teruel, La Puebla de Valverde, Barracas, Navajas y Estivella, según detalló el gestor ferroviario.
Este material, junto a otros elementos de la superestructura, se destinará a la adecuación de la vía en este tramo, así como a la realización de otras actuaciones singulares para permitir la circulación de trenes de mercancías de 750 metros de longitud, actuación que se incluye en el plan director.
EJECUCIÓN HASTA EL 2023
Este texto, que tiene un horizonte temporal de ejecución hasta el 2023, representa una inversión global estimada de más de 386 millones de euros y tiene como objetivo mejorar de forma significativa el decrépito estado de la infraestructura actual para permitir seguir potenciando la competitividad de esta línea como eje estratégico del corredor Cantábrico-Mediterráneo.
Una vez completadas las actuaciones previstas, este plan permitirá a la línea disponer de mayor capacidad de tráfico, reducir de forma sustancial los tiempos de viaje tanto para los viajeros como para las mercancías, una mejor competitividad de los servicios de carga, un incremento de la velocidad máxima de circulación, un aumento de la eficiencia en el transporte, la incorporación de trenes eléctricos, mejores parámetros de seguridad, fiabilidad, confort y la reducción de las incidencias.
La modernización de la línea posibilitará el transporte de entre 48 y 54 trenes semanales por cada sentido de circulación, lo que se traducirá en un volumen de mercancías anual de un millón de toneladas, más de 76.000 TEU (unidad equivalente a contenedores de 6,1 metros) y 21.000 vehículos. Estas cifras son una estimación de un estudio promovido por la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) en colaboración de la Autoridad Portuaria de Valencia y de Castellón, entre otras entidades.
Por la mala situación del trazado, con tramos en muy mal estado, algunas de las empresas ferroviarias se ha visto obligadas a optar por vías alternativas (Tarragona o Madrid), lo que supone incrementos significativos de la distancia de transporte.
