El pleno de las Cortes de Aragón ha aprobado hoy por unanimidad la toma en consideración de una proposición de ley del PAR que plantea una reforma del Código Civil para que los aragoneses no pierdan de forma automática su vecindad civil cuando lleven más de diez años de residencia fuera de la Comunidad aragonesa.

La propuesta del PAR, ha explicado su portavoz, Alfredo Boné, plantea la modificación de los artículos del Código Civil 14.3 y 14.5 para que la vecindad civil se adquiera por residencia continuada durante dos años siempre que el interesado manifieste esa voluntad.

Además que los hijos, cuando cumplan 14 años y en un plazo de cinco años desde su emancipación, en lugar de un año, puedan optar por la vecindad de nacimiento o por la que hayan tenido cualquiera de los padres, no solo la última.

Hasta ahora, pasado el plazo de diez años, se asume la vecindad de la comunidad donde se resida salvo que expresamente se manifieste lo contrario por escrito.

La vecindad civil, ha explicado Boné, es la que ampara la aplicación del derecho foral aragonés, de forma que a los ciudadanos que mantengan su vecindad civil aragonesa les será de aplicación en cuestiones como el régimen matrimonial, la familia, la viudedad, las herencias o la custodia compartida.

La ley, cuando se apruebe en las Cortes de Aragón, se remitirá al Congreso para la tramitación de estas modificaciones, que de contar con el visto bueno en Madrid serían de aplicación en toda España, no solo en Aragón, ha indicado Boné.

Todos los grupos han apoyado la propuesta, si bien la diputada del PP Yolanda Vallés ha advertido de que puede haber problemas de "encaje" respecto a algunos aspectos del ordenamiento jurídico que les podría plantear dudas en el ámbito nacional.

Por su parte, el portavoz de CHA, José Luis Soro, ha avanzado que en la tramitación de la ley en las Cortes planteará que además se articulen los mecanismos para que los aragoneses que ya han perdido la vecindad civil, en la mayoría de los casos por desconocimiento, la puedan recuperar.