Del bolsillo de los aragoneses saldrán en los próximos meses 5 millones de euros para compensar a las eléctricas por los sobrecostes energéticos que tuvieron que afrontar en el 2013 por dos impuestos autonómicos: el canon de saneamiento de aguas y el de daño medioambiental causado por la emisión de gases. Los más de 900.000 clientes que hay en la comunidad con contratos de suministro de electricidad han recibido este mes un aviso por esta cuestión, un recargo puntual que apenas notarán ya que se sitúa en los 3,36 euros de media por consumidor.

La subida, que afecta a otras 13 comunidades autónomas, es consecuencia de un suplemento territorial no aplicado hace seis años y relacionado con los peajes de acceso a la electricidad (la parte fija del recibo). En su día no se repercutió a los usuarios y el Tribunal Supremo dio la razón a las eléctricas que recurrieron.

El recargo fue decretado por el Ministerio de Transición Ecológica en una orden publicada el pasado 12 de marzo, en la que dio seis meses para su aplicación. La medida se ha tomado cinco años después de que el Supremo instara por primera vez a repercutir a los clientes de cada comunidad los tributos propios que el sector paga en ese territorio.

REFORMA DEL PP

El origen se remonta a la polémica reforma energética del Gobierno del PP, que trasladó a los consumidores el pago de tributos autonómicos que asumían las eléctricas mediante la creación de un suplemento territorial. Sin embargo, no se hizo y el sector acudió a los tribunales, que les dio la razón.

El Gobierno de Aragón facilitó los datos requeridos por el ministerio para calcular el sobrecoste, pero mostró -en una carta de junio del 2017- su rechazo frontal a que dichos impuestos se repercutieran a los consumidores.

De acuerdo con el borrador del ministerio, el suplemento reclamado a Aragón asciende a 5.016.808,18 euros (4.621.044,23 de los tributos pagados en el 2013 y 395.763,95 de intereses). Es la cuarta cantidad más alta que abonarán las autonomías, pero a gran distancia de los 37,6 millones de Galicia y los 31,1 de Castilla y León, que supondrán para sus consumidores un suplemento de 15,75 y 13,18 euros.

La cuantía variará en cada caso porque depende de factores como la potencia contratada y el consumo. Si el importe supera los dos euros, se prorrateará en las facturas de todo un año. Para un hogar medio de Aragón (4,6 kilovatios de potencia y 3.500 kilovatios hora de consumo) supondrá un recargo anual de 4,3 euros (0,35 en cada factura mensual), según cálculos de la OCU.