Los Bomberos de Zaragoza recuperaron ayer el cuerpo sin vida de un joven que fue encontrado en el río Ebro, a la altura del puente de Piedra de la capital aragonesa. Aunque se desconocen las causas del suceso y hay en marcha una investigación, la Policía Nacional baraja la posibilidad de que se trate de un accidente y hoy se practicará la autopsia al cadáver que, en un principio, no presentaba signos de violencia, según indicaron fuentes policiales.

Se da la circunstancia de que, como informaron los bomberos de la ciudad, el joven no portaba documentación alguna tras sacarlo del río. No obstante, ayer fue identificado y también se comunicó el hallazgo a la familia del fallecido. Según dio a conocer ayer el Ayuntamiento de Zaragoza, el joven podría contar con alrededor de 30 años.

El cuerpo sin vida fue visto alrededor de las 8 de la mañana por una persona que alertó a la policía del descubrimiento. Estos, a su vez, dieron aviso a los bomberos de la capital aragonesa. Los efectivos de este cuerpo desplazados instalaron un puesto de mando en el lugar, al que acudieron una ambulancia, la unidad de buceadores y también la de escaladores para realizar las labores de extracción, en las que se utilizó una lancha.

El cadáver se encontraba flotando cerca de la segunda arcada del céntrico puente, si se observa desde la margen derecha del Ebro. Tras extraerlo del río, se trasladó el cuerpo al Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA), donde se le practicará hoy la autopsia para , de esta forma, determinar las causas del fallecimiento.

Después de que comenzaran el pasado fin de semana, las fiestas del Pilar vuelven a teñirse de luto por la muerte de un joven. Así sucedió hace siete años, cuando fallecieron dos estudiantes, uno zaragozano y otro irlandés, en la A-2, tras salir del pabellón de Interpeñas.