CHA afronta el próximo fin de semana su "congreso de la madurez", en palabras de sus principales dirigentes, que ayer dieron a conocer la organización de la séptima asamblea del partido, en la que se renovarán los órganos de dirección. Bizén Fuster explicó que se presenta de nuevo a la reelección como presidente tras constatar "los logros conseguidos" desde la última cita congresual.

Haciendo país. Desde la izquierda, un aragonesismo para todos será el lema de la asamblea, que comenzará el viernes con el informe de gestión y finalizará el domingo con la elección de la nueva ejecutiva. Como informó ayer este diario, Fuster optará por cuarta vez a la presidencia del partido, según declaró, al comprobar que tiene "la confianza" de sus compañeros y que se han logrado los objetivos del congreso del 2001.

Crecimiento interno y externo. Era uno de dichos objetivos, cumplido al haber consolidado CHA su presencia en todas las instituciones territoriales de Aragón y al haber superado la cifra de 3.500 militantes.

Ahora, Chunta se marcará nuevos retos, perfilados en la ponencia política que se debatirá en el congreso y que adelantó José Antonio Acero, secretario general saliente. Reforzar la organización, desarrollar una "conciencia nacional", propiciar que el partido "asuma el liderazgo aragonesista y progresista", incrementar la coordinación de los diversos grupos de CHA en las instituciones y "aragonesizar Aragón" son algunas de estas nuevas metas, según Acero.

La asamblea, previsiblemente, aumentará el número de miembros del comité nacional (de 55 a 75) dado el crecimiento del partido. Podría presentarse una alternativa a Fuster, pues integrantes de una corriente crítica (autorizada por los estatutos de Chunta) recogen avales.