El cuerpo sin vida de un hombre de 61 años fue encontrado sin signos de violencia en la madrugada de ayer en el interior de su vivienda, situada en el barrio zaragozano de Casetas. El hallazgo se produjo tras la voz de alerta de un vecino, por el tiempo transcurrido sin verle.

Fue a las 23.20 horas del sábado cuando un vecino de la calle Parque Ricardo Mur, donde residía el fallecido, se personó en el puesto de la Guardia Civil del barrio de Casetas para explicar la extrañeza que le producía el hecho de que había transcurrido más de una semana sin cruzarse con su vecino.

Producido el aviso, los agentes intentaron localizar al individuo en diversos hospitales, pero ninguno de los centros hospitalarios ofreció respuestas positivas, tras lo cual se procedió a enviar a los Bomberos al domicilio. Estos accedieron a la vivienda a través de una ventana y una vez dentro localizaron el cuerpo sin vida de una persona que yacía en el cuarto de baño. Las oportunas comprobaciones permitieron identificar al fallecido como Gregorio G.C., nacido en la ciudad de Zaragoza en 1943.

Ya a las 0.45 horas de la madrugada de ayer se personó un equipo de la Policía Judicial, que tras realizar una inspección ocular no encontró ningún signo de violencia en el cuerpo. El juzgado de Guardia se encargó de las tareas de levantamiento de cadáver, que fueron llevadas a cabo en torno a las 2,00 horas de ayer por la Hermandad de la Sangre de Cristo.

Fue la voz de alerta del vecino lo que permitió localizar el cuerpo de Gregorio G.C., más de siete días después de que el vecino le viera por última vez.