La Policía Nacional ha detenido en la provincia de Huesca a seis personas de origen magrebí cuando transportaban 700 kilogramos de hachís en un convoy formado por cinco turismos con el que proyectaban pasar la droga a territorio francés para su distribución ilegal.

En un primer control policial realizado el 29 de abril en el puerto de Monrepós, en la carretera N-330 en dirección a Francia, fue interceptado uno de los cinco vehículos y detenidos sus dos ocupantes.

El resto de vehículos dio la vuelta en la misma carretera tras conocer la existencia del control policial y huyó a gran velocidad en dirección a Huesca y con el objetivo de tomar una ruta alternativa por Puente la Reina de Jaca.

A la persecución del convoy de los sospechosos se sumó la Guardia Civil, cuyos agentes pudieron interceptar otros dos de los vehículos sospechosos y detener a sus respectivos conductores en Puente la Reina de Jaca.

Los dos vehículos restantes, informados de la situación por sus cómplices, cambiaron el sentido de la marcha una vez más para huir en dirección al puerto de Santa Bárbara. Tras una búsqueda que duró toda la noche, los responsables policiales localizaron los dos vehículos restantes en el pueblo de Villalangua, con la droga en su interior.

Los dos sospechosos, con los datos identificativos aportados por la Policía Nacional, fueron localizados escondidos en una senda de montaña de Villalangua que se dirige al pico de Saosa.

En la operación fue detenidos seis ciudadanos de origen magrebí con numerosos antecedentes policiales en Francia pero con residencia legal en este país.

Tras prestar declaración ante el juzgado de guardia de Jaca, los seis detenidos ingresaron en prisión por un presunto delito de tráfico de drogas. Los miembros de este grupo tomaban grandes medidas de seguridad para dificultar la investigación policial y se servían de vehículos de alta gama que compraban en Alemania y que después de unos pocos viajes volvían a vender.