El presidente de Aragón, Javier Lambán, manifestó ayer su intención de aprovechar el centenario de la creación del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido para «generar riqueza y empleo» en el Sobrarbe, una comarca «que es la única del Pirineo aragonés que carece del beneficio de la nieve» para lograr estos objetivos a través del turismo. Al respecto, el presidente precisó que «son muchos los proyectos» que han imaginado, en ese sentido, «para que en los distintos municipios de esa comarca florezcan iniciativas relacionadas con la ganadería extensiva, el turismo y cualquier otra actividad que sea sostenible y compatible con el medio ambiente».
Lambán asumió este compromiso durante su discurso en el acto conmemorativo por los cien años de la creación de este Parque Nacional, una cita donde aprovechó para invitar al Rey a que presida el acto central del centenario. Precisamente, sobre la fundación de este espacio y la relación con las personas que lo habitan señaló que sus promotores «sabían que, además de proteger el entorno natural, había que procurar que los habitantes pudieran vivir con dignidad».
Concienciación
De la misma forma, el presidente autonómico afirmó que quieren sacar partido de este centenario «para concienciar a los ciudadanos aragoneses sobre los efectos negativos del cambio climático en el Pirineo. Acerca de los problemas derivados de este escenario, Lambán indicó que seis regiones francesas y españolas mantienen un observatorio en la cordillera pirenaica que «depara sorpresas muy desagradables cada año que pasa» en lo que respecta a la extinción de glaciares, a la elevación de las temperaturas, entre otros. «El centenario lo vamos a utilizar también para que estas circunstancias tengan resonancia y que la sensibilización de la ciudadanía, que es cada día mayor, se beneficie de la celebración», añadió.
De la misma forma, explicó que este evento «pretende rendir homenaje a los hombres y las mujeres que fueron fieles intérpretes del mandato de 1918 y que han mantenido el parque en perfecto estado de revista hasta hoy», como también «a las generaciones anteriores». Así, precisó que «la naturaleza no actúa por sí sola» y que el Parque Nacional de Ordesa «es una maravillosa realidad gracias a la interaccion entre el hombre y la naturaleza; gracias al amor que miles de hombres y mujeres a lo largo de la historia le han profesado al monte».
Lambán también destacó que este parque es un «santuario natural» que constituye «la joya del patrimonio natural aragonés» y recordó a los promotores de la primera Ley de Parques.
Sobre estos, afirmó que descubrieron en la naturaleza un «elemento formidable» para la nacionalización del país. Precisamente, juzgó que la creación de los parques responde a lo que los historiadores llaman «patriotismo forestal», un término que, para el presidente de Aragón, «es un ingrediente fundamental de cualquier patriotismo que se precie. Sobre ello, añadió que, en su idea de Aragón, «el patrimonio natural, el paisaje, es una seña de identidad absolutamente irrenunciable», subrayó.
