El repaso al estado de las obras del Pacto del Agua que efectuó el delegado del Gobierno de España en Aragón, Gustavo Alcalde, el pasado domingo en EL PERIÓDICO no convence a los grupos de la oposición. Estos consideran que se ha avanzado poco y critican tanto el cronograma como las prioridades establecidas por la Administración central.
El portavoz del PSOE en las Cortes, Javier Sada, dijo ayer sentirse "muy preocupado" por los escasos avances que a su juicio se están dando. Denunció la parálisis de las obras de Mularroya y que se apueste por el embalse de Almudévar sin acometer simultáneamente Biscarrués, ya que la primera obra "no tiene ningún sentido" sin la segunda.
Asimismo, Sada censuró la "lentitud" en algunas obras pendientes y las "posiciones trasvasistas" del ministro Arias Cañete. "Siempre que ha venido a Aragón se le ha preguntado claramente por el trasvase del Ebro y jamás ha sido claro, jamás lo ha descartado", indicó el responsable socialista.
Mientras, el portavoz en materia de Medio Ambiente de CHA, Joaquín Palacín, Joaquín Palacín, criticó que "el delegado del Gobierno saque pecho de unas obras que son insostenibles, irreales y que están financiadas con un dinero público que debería ir a garantizar los servicios públicos de calidad en lugar de intereses de constructoras o para allanar el camino hacia la privatización de los recursos de Aragón". A su vez, consideró que estas "obras insostenibles" son la mejor garantía "para un futuro trasvase".
La portavoz de IU en las Cortes, Patricia Luquin, consideró que las declaraciones de Alcalde son "propaganda sin más, para aparentar que hacen algo en Aragón y sacarle la cara a su socio de Gobierno, el PAR". A su juicio, es preocupante "que en las obras que aglutinan poco consenso se empeñen en avanzar, como Biscarrués, y las que son más necesarias y responden a demandas más reales estén casi paradas". Su compañero y portavoz en Medio Ambiente, Miguel Aso, mostró su preocupación por "el problema de seguridad en Yesa y los desfases de esta obra", así como que hayan aparecido obras que no están consensuadas y de las que apenas se ha informado, como la presa en el Bergantes. Aso también criticó el modelo hidráulico del PP, "más preocupado en la inversión en obras que en una gestión eficaz y sostenible de los recursos".
Una visión distinta tiene el PAR, cuyo portavoz, Alfredo Boné, consideró que "es indudable que varias obras del Pacto del Agua están adoptando una velocidad de crucero interesante, tal como se incluyó en el acuerdo de gobernabilidad PP-PAR". Entre ellas destacó Yesa, San Salvador o la regulación del Gállego.
Boné consideró que "este ritmo debe mantenerse para seguir estando a la altura del esfuerzo hecho en Aragón" y deben acompañarse "de los respectivos planes de restitución". Junto a ello, "hay que profundizar en las fórmulas para garantizar que Aragón gestione la reserva de agua que ha de blindar cualquier posible intento de trasvase, que siempre encontrará el rechazo frontal y tajante de Aragón". Por su parte, el presidente de Riegos del Alto Aragón, César Trillo, dijo no poder atender la llamada de este diario para exponer su punto de vista.
