El diputado del PSOE en las Cortes de Aragón José Ramón Ibáñez ha afirmado hoy que las promesas del consejero de Obras Públicas, Rafael Fernández de Alarcón, son "garantía de incumplimiento" y ha manifestado que aunque hay motivos para su reprobación, espera que la presidenta, Luisa Fernanda Rudi, "haga el relevo".

Como ejemplos de esos incumplimientos, Ibáñez ha citado el plan general de carreteras, los transportes, y concretamente el convenio con Renfe, y la vivienda, al tiempo que ha tildado al consejero de "ahuyentador de empresas" por no atraer, ha dicho, nuevas compañías a las plataformas logísticas.

Ibáñez ha criticado que lo único que ha cumplido Fernández de Alarcón es la "destrucción" del Plan Red de Carreteras, ya que el que "vendió" como alternativa, el Plan General de Carreteras, se incumple "reiteradamente", a pesar de que las vías de la Comunidad son las peor conservadas de España, ya que en dos años se han presupuestado unos 80 millones cuando en virtud de ese plan tendrían que haber sido unos 260.

En cuanto al convenio con Renfe, ha criticado que transcurrido un año desde que se presentó sigue sin firmarse y además, la segunda fase, la que permitiría mejoras en los servicios, debía haberse puesto en marcha el pasado mes de abril.

Lo mismo ocurre, ha dicho, con el Plan de Vivienda 2014-2016, que tampoco se ha firmado con el Ministerio de Fomento, a pesar de que el consejero anunció que se suscribiría el pasado mes de marzo, cuando es importante para impulsar todo el sector de la rehabilitación y ayudaría a dinamizar el empleo.

Ibañéz ha anunciado que ha presentado cuatro proposiciones no de ley y tres preguntas relativas a todos estos asuntos.

En respuesta a Ibáñez, el diputado del PP Miguel Ángel Lafuente ha comparecido ante los medios para "rebatir" con datos esta afirmaciones y ha asegurado, respecto de las cuantías del Plan Red, que 48 de cada 100 euros representaban gastos de gestión indirecta a diferencia del plan del actual Gobierno, que dedica el 95 por ciento del presupuesto a las carreteras y el 5 por ciento a gestión, con la particularidad además de que no genera déficit.

En cuanto al convenio con Renfe, se ha preguntado cómo el PSOE se atreve a hablar de servicios ferroviarios cuando traía a Aragón "material de quinta mano" y cuando el actual Gobierno y el extremeño son los únicos que cuentan con líneas no declaradas de obligación de servicio público.