El Consejo de Ministros, a propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica, va a aprobar de manera inminente tres líneas de ayudas para impulsar la descarbonización que tendrán un especial incidencia en Aragón, donde la transición energética tiene un especial impacto por el cierre de la minas de carbón y la térmica de Andorra. Una de estas iniciativas, dotada con 20 millones, está destinada precisamente a la restauración de explotaciones mineras de Teruel y León. Los otros dos programas financiarán actuaciones de eficiencia energética en el sector industrial y en los municipios. Alguna de estas medidas podría ver la luz hoy mismo. En total, la comunidad podría captar unos 25 millones de euros, como mínimo, de los tres planes.

Así lo avanzó la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, en una entrevista concecida a EL PERIÓDICO DE ARAGÓN, que se publicará el próximo domingo. La cuantía exacta que capte Aragón dependerá de la asignación que reciban los proyectos que presenten las empresas mineras para llevar a cabo en los próximos cuatro años (hasta el 2023) los trabajos de restauración ambiental de las últimas minas de carbón turolenses, ubicadas en Ariño, Foz-Calanda y Estercuel, pero todo apunta a que se llevarán la mayor parte de los 20 millones presupuestados. Las dos primeras son de Samca, que por la dimensión de la producción que tenía se hará con la mayor porción de ayudas, y la tercera de Compañía General Minera.

Los fondos, que serán gestionados por el Instituto para la Restauración Minera del Carbón y Desarrollo de Alternativo de las Comarcas Mineras (IRCM), financiarán parte de los costes derivados de la clausura de las instalaciones y a la rehabilitación del espacio natural donde se localizó la actividad minera. Estas tareas de recuperación del territorio fomentan la creación de empleo en las comarcas afectadas.

El objetivo es dar cumplimiento a la normativa comunitaria, que marcaba el pasado 31 de diciembre como fecha límite para cerrar las minas que no fueran competitivas sin incentivos públicos, como así hicieron las tres que quedaban activas en Teruel. Esas ayudas están contempladas en el plan del carbón 2019-2017 suscrito el pasado octubre por el Gobierno, los sindicatos y empresarios del sector.

INDUSTRIA Y MUNICIPIOS

Por otra parte, el Ejecutivo central destinará otros 4,35 millones a Aragón para actuaciones que favorezcan el paso a una economía baja en carbono (medidas de ahorro y de eficiencia energética en edificaciones e infraestructuras, iniciativas de movilidad urbana sostenible, promoción de energías renovables). Estas ayudas estatales, conocidas como programa de Desarrollo Urbano Sostenible (DUS) y destinadas a entidades locales, están cofinanciadas por el Gobierno y los fondos europeos Feder.

La comunidad recibirá otros 10,5 millones de un programa para la mejora de tecnología y nuevos sistemas de gestión energética en pequeñas, medianas y grandes empresas en el sector industrial. Estas subvenciones, también cofinanciadas con fondos Feder, serán gestionadas por las comunidades.

La zonas afectadas por la transición energética, como es el caso de Andorra y su entorno, tendrán preferencia en la concesión de estos dos últimos programas.