Toni Abadía acabó la temporada de la mejor manera posible. El atleta del Nike debutó en la distancia del medio maratón con un marcón de 1.01.15, nuevo récord de Aragón por delante de Said El Wardi. Es la cuarta mejor marca española de la historia tras los siderales 59.52 de Fabián Roncero, Martín Fiz y Alberto Juzdado. La prueba tuvo un nivel espectacular. El keniano Abraham Kiptum realizó el récord del mundo de la distancia con 58.18, mejorando en cinco segundos la marca del eritreo Zersenay Tadese en Lisboa en el 2010. Hasta diez corredores bajaron de la hora en esta edición donde completaron el podio los etíopes Jemal Yimer Mekonen y Abadi Hadi Embaye.

En la prueba femenina se impuso la etíope Gelete Burka con 1.06.11. Raquel Miró, zaragozana del Simply Scorpio hizo su mejor marca personal en su segunda experiencia en la distancia. Acabó la tercera española tras Diana Martín y Tere Urbina con 1.15.33. En júnior Eduardo Menacho (Sorpio) batió la plusmarca nacional de su categoría con 1.06.57. Abadía fue el mejor español por delante del Chiqui Pérez (1.02.19) y Javi Guerra (1.02.26). El objetivo de Abadía era bajar de 1.02 en su primera carrera sobre la distancia. «No me lo esperaba. Ha sido de las mejores carreras que he disputado a nivel mental. He tenido un momento de sufrimiento al quedarme solo en el kilómetro 13», indicaba el aragonés.

En ningún momento tuvo malas sensaciones. «Pero me he dado cuenta en el kilómetro 10 que he pasado demasiado rápido con 28.42. Tenía idea de pasar a 29.10. Ver esa marca ha sido algo espectacular», explicaba el pupilo de José Luis Mareca. El último mil lo corrió en 2.49.9. «Ha sido una carrera muy inteligente en gestión de fuerzas aunque los dos últimos kilómetros han sido un poco complicados. Iba cansado y han sido los momentos más difíciles de la carrera», dice.

En el kilómetro tres Abadía ya estaba casi descolgado. «Se ha pasado a 8.19. Me impresionaba verme tan atrás con los africanos por delante. En el kilómetro cinco ya he ido cogiendo cadáveres. Pero he estado concentrado en mi carrera sin dar importancia lo que pasaba por delante. Hoy no he cometido ningún error. Incluso podría haber corrido un poquito más», reconocía.

Abadía es muy ambicioso con respecto a la distancia. «Soy relativamente inexperto, se puede entrenar algo mejor y veo factible bajar de 1.01 y en un futuro podría tener como meta bajar de la hora», confiesa el fondista. El circuito era ideal. «Pegaba una pequeña brisa y corríamos en un trazado de Fórmula 1», indicaba.

Acaba un gran año de Abadía con los títulos nacionales de 5.000 y 10.000 y su participación en el Europeo de Berlín. «El año de Río fue muy bueno en la pista. Y en este curso me quedo con el récord de España de los 10K en Laredo con 27.48. Pero lo mejor está por llegar», concluía.