El Real Zaragoza salió del partido ante el Mallorca con 273 minutos sin encajar ninguna diana, desde que Juanto, para el Sabadell, había perforado en los últimos instantes de esa cita la portería de Whalley, que después puso el candado en los choques frente al Alavés (1-0), contra el Llagostera (0-1) y ante el conjunto mallorquín (2-0). Por entonces, al término de la séptima jornada, el Zaragoza era el cuarto equipo menos goleado, solo llevaba seis dianas en contra, cuatro de ellas encajadas en el Mini Estadi, y había sido capaz de dejar su portería a cero en cuatro de las siete citas ligueras, unos datos que reflejaban una consistencia defensiva que ha mandado a la basura.

De hecho, en las últimas cinco jornadas es el equipo de Segunda División que más goles recibe, con 11 tantos. Nadie ha encajado esa cifra en estas últimas cinco jornadas y semejante bagaje defensivo ha hecho que el Zaragoza, con 17 dianas en contra, solo tenga a cinco equipos que hayan recibido más en lo que va de Liga. En concreto, Albacete (23), Osasuna (22), Sabadell (21), Mallorca (21) y Alcorcón (20).

La racha comenzó a truncarse contra el Lugo, donde el Zaragoza recibió tres dianas (3-3). David López marcó de falta y después aprovechó un desajuste defensivo para plantarse ante Whalley y anotar de disparo cruzado. Luis Fernández cerró la cuenta con un disparo raso tras robarle la cartera a Lolo. Mientras, ante el Racing (2-1) Koné se aprovechó de un despiste de Rubén ante Iñaki y, en Alcorcón (1-3), Fausto mandó a la red un mal despeje de Dorca. En los dos últimos partidos la debilidad defensiva se ha agigantado, con dos derrotas y seis goles. Contra el Tenerife (2-3), Ifrán batió a Whalley tras superarlo en su salida y después lo hizo de penalti de Rubén sobre Cristo Martín, mientras que Vitolo marcó de pena máxima, inventada por el árbitro, de Borja sobre Hugo Álvarez. En Gijón (3-1), Carlos Castro marcó a bocajarro el primero, aprovechó el despeje de Whalley a cabezazo de Rubén para el segundo y Sergio en un córner hizo el tercero.

Llagostera, Recreativo de Huelva y Albacete, con diez dianas en estas cinco jornadas, siguen al Zaragoza en ese ránking de pobreza defensiva de las últimas semanas, mientras que el equipo más consistente ha sido el Mallorca. Cuando el conjunto balear salió de La Romareda llevaba 19 goles en siete jornadas y era el más goleado. En las últimas cinco citas, con repóker de victorias, solo encajó dos más.

Mientras, el Sporting solo lleva tres dianas en los últimos cinco choques y con 9 en total es junto al Valladolid el equipo menos goleado de la categoría. Las Palmas, Valladolid y Girona, los tres equipos que junto al sportinguista copan las cuatro primeras plazas de Segunda, solo han recibido cuatro goles en los últimos cinco partidos, señal de que la solvencia defensiva es vital para estar arriba. El Zaragoza la ha perdido en los últimos partidos y por eso tras la derrota en El Molinón se cayó de la zona de promoción que pisó tras ganar en Alcorcón. Hasta esa cita en Santo Domingo la pegada había estado por encima de los goles encajados, pero ante el Tenerife y el Sporting la debilidad defensiva ha sido superior.

LA BAJA DE MARIO

Esa inconsistencia atrás del Zaragoza tiene varias causas, pero una de las más evidentes es la ausencia de Mario. Contra el Lugo, el central canario se marchó a falta de media hora y el equipo aragonés encajó dos tantos en ese tramo final, mientras que no estuvo en las derrotas, ambas con tres dianas encajadas, contra el Tenerife y el Sporting. Es decir, de los últimos 11 tantos recibidos, 8 han sido sin Mario en el campo.