Ni se siente cuestionado ni le llegan las críticas. Iñaki Sáez dio ayer un paso al frente y anunció que cumplirá un contrato que no ha firmado todavía. Después de reunirse nuevamente con el presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Angel María Villar, el técnico vasco se declaró capaz de enderezar el rumbo de la selección española para clasificarla para el Mundial de Alemania 2006. Dos años de compromiso a razón de 571.000 euros (95 millones de pesetas) por cada uno, según desveló ayer la cadena SER.

"Lo más fácil era marcharse, pero sería de cobardes abandonar cuando hay mucha gente que ha apostado por ti", dijo Sáez, sin atender al hecho de que hay muchísima más que pide su renuncia tras el fracaso de España en Portugal. Su explicación es tan simple como que considera que tiene el ambiente más adecuado para seguir trabajando con la selección. Una ilusión que le pasará factura a las primeras de cambio, como se la pasó a Javier Clemente tras el Mundial de Francia.

PRESION TERRIBLE La presión sobre él ha sido terrible estos días y amenaza con multiplicarse por cien, pero como quien oye llover. "Sigo estando a gusto porque hay un grupo de jugadores que ha depositado su confianza en mí, unos técnicos que están conmigo y el fútbol español es el que me ha escogido para ser seleccionador. No puedo pedir más", afirmó Sáez antes de someterse a las preguntas de los informadores. Después, insistió en que el entorno que le rodea es favorable, calificó con un 6 la actuación española en la Eurocopa y se enrocó con que el rechazo a su gestión no es general.

"Lo siento, pero no voy a ir preguntando a todo el mundo. Si la opinión pública son mis amigos, todos me han dicho que debo continuar. Si la opinión pública son mis enemigos, pues querrán que me vaya", continuó Sáez, que dio muestras de nerviosismo en varios momentos de la comparecencia, y llegó a perder los papeles cuando escuchó decir que la selección había regresado "como una banda" y al ser preguntado sobre si era consciente de que algunos jugadores, entre ellos Puyol, habían declarado que el equipo ante Portugal lo había hecho la prensa. "Es que mi alineación puede coincidir alguna vez con lo que pensáis vosotros, pero no voy a ir por ahí, por esas preguntas sospechosas", contestó el técnico después de recuperar la calma.

Mañana dará explicaciones el máximo mandatario federativo, Angel María Villar, que ofreció la renovación a Sáez, y éste aceptó y firmó, antes de comenzar la Eurocopa y que en septiembre deberá someterse a elecciones para la presidencia de la Federación Española, en las que optará a la reelección frente a su exsecretario Gerardo González. Villar comparecerá a las 13.00 horas en la ciudad de fútbol de Las Rozas para dar su punto de vista sobre el papel de la selección en la Eurocopa y para explicar por qué mantiene su plena confianza en el seleccionador actual pese al pobre papel desempeñado en la competición continental. Ante la posibilidad de que haya nuevo presidente en la federación después de las elecciones de septiembre, Sáez comentó que "si hay nuevo presidente, no tendré ningún problema en poner mi cargo a su disposición".