El presidente del Real Zaragoza, Christian Lapetra, ha declarado hoy, tras finalizar la Junta de Accionistas del club, que confían en Víctor Fernández, que ayer fue presentado como nuevo entrenador del equipo en sustitución de Lucas Alcaraz.

"Él está convencido de que hay mimbres suficientes para sacar adelante los resultados y llegar a la senda de victorias para estar tranquilos", ha añadido.

Igualmente ha explicado que la situación del equipo, en posiciones de descenso a Segunda B, "preocupa" porque no está donde todos desean ni donde se pensaba que estaría a estas alturas de temporada por nivel de plantilla.

También ha reconocido que entrar en puestos de descenso "trasciende" del propio resultado deportivo y que, por eso, pedía a la plantilla que fuera consciente de la situación y de lo que implicaría un descenso.

Lapetra ha señalado que a principio de temporada la idea era tratar de aprovechar el rendimiento del equipo después de lo logrado la pasada temporada (jugar las eliminatorias de ascenso) y trasladarlo a la actual pero que no había sido así y que, por ello, se habían visto obligados a tomar decisiones como el cambio de entrenador en dos ocasiones.

El dirigente zaragocista ha analizado que con la llegada de Lucas Alcaraz en sustitución de Imanol Idiakez se buscó "un perfil más solvente para hacer crecer al equipo" pero que los resultados mandan y que el preparador andaluz tampoco había conseguido mejorar ni las cifras de su antecesor ni el juego, por lo que se habían visto abocados a modificar la dirección del equipo con la llegada de Víctor Fernández.

Preguntado sobre la posibilidad de realizar incorporaciones de jugadores en el mercado invernal ha contestado que el límite salarial está "completo" y que solo se puede liberar "si hay salidas y tienen un coste mínimo".

También ha manifestado su "plena confianza" en la labor del director deportivo, Lalo Arantegui, y ha desvelado que "en ninguna reunión del consejo de administración se ha planteado destituirle".

Lapetra ha expresado que el objetivo real del club ahora es "ganar al Extremadura" el próximo sábado, partido que ha calificado como "final".

"No pensábamos que fuera un rival para mantener la categoría. Nuestro mensaje en verano venía reforzado por el rendimiento de la pasada temporada y por eso el mensaje fue el de lograr el ascenso, pero hoy debemos ser realistas y tenemos que salir de los puestos de descenso", ha subrayado.

Al respecto de los aficionados ha destacado que "no pueden estar orgullosos de nosotros porque no les ofrecemos un espectáculo agradable" y a los jugadores les ha pedido "que sean conscientes de lo que es estar en Real Zaragoza y de la situación en la que se encuentra el club".