Han pasado casi cuatro años desde que se produjo la imputación de Leo Messi por tres delitos de fraude fiscal y el astro argentino ha decidido explicar cómo vivió aquel episodio. Y lo ha hecho sin morderse la lengua: admitiendo que las acusaciones le afectaron mucho en la esfera personal y atribuyendo la actuación judicial a una campaña deliberada para herirle: «Me sentí muy atacado desde Madrid y fue duro. [...] Era la orden de atacarme a mí, de pegarme y de aprovechar el momento de debilidad que estábamos pasando por lo que sucedía. Era una orden de Madrid. Era así. Lo sabía».

Habla también el crack rosarino en Sport de la actualidad del FC Barcelona, y aprovecha la ocasión para lanzar un aviso a navegantes: la apuesta por la cantera, subraya, debe ser innegociable. «Desde Guardiola es cuando más se vio la entrada de jugadores de la cantera. En los últimos tiempos se ha perdido un poco y se han ido jugadores importantes. [...] Es raro que se vayan del mejor equipo del mundo a uno mucho menor al ver más posibilidades», valoró la estrella argentina.