El mayor revendedor de España, especializado en la distribución de localidades de todo tipo de espectáculos deportivos y musicales, se llama Emilio Navarro, es natural de Cádiz y tiene 33 años. Asegura disponer todavía de más de 300 entradas y de un importante número de carnets de socios azulgranas no especificados, repartidos por todas las zonas del Camp Nou, para presenciar el clásico del sábado.

Internet es la base principal de su negocio, desde que en 1999 empezó a operar a través de la red. Dispone, en la actualidad, de cuatro webs (reventa.org y todoentradas.net son las dos principales). Su centro de operaciones está en Madrid, donde este diario le localizó el pasado domingo. Navarro declinó el contacto personal, tras modificar por dos ocasiones la hora de la cita pactada en una céntrica plaza madrileña. En cambio, sí aceptó explicar diversos detalles en la comercialización de las entradas para el derbi, al margen de los mecanismos legales.

Contacto con el club

El revendedor aseguró que ya en septiembre adquirió el 70% de las entradas que obran en su poder. El paquete le fue entregado por los propios socios azulgranas, cuando el Bar§a abrió la venta entre los titulares de los nuevos carnets conseguidos en la operación El Gran Repte . "El resto me ha llegado de una empresa, que colabora con el Bar§a, y de un intermediario que tiene un contacto muy bueno en el propio club", asegura Navarro, que se inició en la reventa hace 10 años, cuando empezó a comercializar los tíquets para el Carnaval de Cádiz con el papel agotado en las taquillas oficiales.

Dispone de colaboradores en las principales ciudades españolas, en lo que entiende es un negocio "normal, como cualquier otro". Navarro añade: "Yo no estafo a nadie y hasta es posible que pueda legalizar las webs y cobrar las entradas a través de tarjeta de crédito. Creo que hago un servicio. Quienes a mí se dirigen son personas adineradas. Las familias que tienen dificultades para llegar a final de mes, no compran entradas en la reventa, ya que se conforman con ver el partido por la tele".

Cuenta que ha sido detenido varias veces por la policía y que ha pagado algunas multas por infracción al reglamento en la venta de localidades. Su negocio se extiende en el extranjero. Se ha desplazado a los dos últimos Mundiales, y a la sede de los Juegos Olímpicos de Sydney y Atenas. "Allí nos encontramos revendedores de todo el mundo. Nos reunimos, establecemos contactos y realizamos intercambios. Por eso, ahora, yo ya tengo entradas para conciertos como el de Iron Maiden, del 25 de abril del 2005, en París".

Detenido en Atenas

En Atenas, fue detenido junto al Estadio Olímpico, en agosto, cuando ofrecía localidades para varias finales de atletismo. "Fue una redada. Nos enviaron a 40 revendedores al calabozo, donde pasamos la noche. A la mañana siguiente, la propia policía griega nos compró las entradas que teníamos". Para el clásico del sábado ha entregado localidades, a través de una agencia de viajes británica, a un grupo de 24 ciudadanos de aquel país que se desplaza especialmente a Barcelona. "También he vendido a cuatro japoneses que vienen exclusivamente a ver el derbi". Multinacionales y hoteles de lujo, a través del servicio de recepción, figuran entre su clientela fija.

Afirma que ha llegado a vender hasta 1.200 tíquets en un Bar§a-Madrid. En el último duelo del Bernabéu repartió, "sin querer", entradas falsificadas. "Fui timado por un taquillero del Madrid, que luego, según me han dicho, fue despedido. Duplicó entradas, perfectas, que yo distribuí entre mis clientes. Tuve que reponer todo el dinero".

No descarta viajar esta semana a Barcelona. "Recibo más de 50 llamadas al día. Mi número de teléfono figura en Internet. Es un teléfono de Movistar... por eso, la policía, al igual que usted, sabe dónde estoy. Pero yo estoy tranquilo con mi negocio".