El mundo del deporte está de luto por la inesperada pérdida de Vinicius Noronha da Silva, jugador del CV Teruel. El brasileño, de 26 años, falleció la madrugada del lunes y fue encontrado por un compañero del equipo tendido en la cama de su domicilio de la capital turolense, según explicó el presidente de la entidad, Carlos Ranera.
El jugador debía acudir al autobús con el resto del equipo para desplazarse a Alcañiz, donde iban a disputar el primer partido de la pretemporada contra el conjunto castellonense del L’Illa Grau. Al ver que Vinicius no aparecía, miembros de la entidad acudieron a su residencia y encontraron su cadáver. El velatorio de Vinicius será en el Tanatorio San Julián a partir de las 12.00 y el funeral, mañana a las 12.30 horas en Santa Emereciana.
La noticia cayó como un jarro de agua fría en la entidad. El famoso tópico que señala siempre se van los mejores en este caso es cierto. «Estamos muy jodidos. Esto es un palo muy gordo», apuntó Ranera muy emocionado. El presidente lo recordó como «un chaval muy extrovertido, un gran compañero. La prueba de ello es evidente. Llevaba cuatro temporadas seguidas con nosotros y se relacionó con toda la familia que conformamos el Voleibol Teruel: con los chicos, con las chicas... Era muy especial».
Vinicius era feliz en Teruel. Llegó en el año 2015 y, durante las últimas cuatro campañas, se ganó el cariño y el afecto de toda la afición turolense. «Era tan bueno como profesional y como persona que decidió quedarse en Teruel cuando podría haber ido a otras Ligas, y así poder mejorar como jugador. No obstante, él estaba muy a gusto con el cuerpo técnico, con la ciudad, con la forma de funcionar del club, y por eso seguía con nosotros», explicó el máximo mandatario. El líbero brasileño era uno de los mejores jugadores del equipo. Sus buenas actuaciones sobre la pista fueron clave para la consecución del histórico triplete del club (Copa, Copa del Rey y Superliga). De hecho, fue elegido el mejor jugador de su posición en la Liga.
Galardones a un lado, Vinicius destacaba por «transmitir mucha alegría y mucha confianza. Tenía mucho carácter en la pista y un futuro por delante increíble. Hemos perdido más que un jugador», recalcó Ranera.
El exentrenador del club, Carlos Carreño, lo conocía mejor que nadie. Fue el encargado de que el jugador recalase en la disciplina naranja. «Le cogí un cariño especial y he seguido en contacto con él (Carreño fue destituido en marzo del 2016). Vinicius procedía de una familia bastante humilde y quería probar en Europa porque no había jugado en equipos de primer nivel en Brasil. Llegó con un sueldo normalito pero fue mejorando y estaba supercontento. Sabía lo mucho que había dejado en su país y que le merecía la pena luchar», comentó.
A expensas de que la autopsia dictamine la causa del fallecimiento, Vinicius, comentó el presidente, superó «todas las pruebas pertinentes que se le realizan a cada uno de los jugadores. En ninguna se le detectó nada que hiciera saltar las alarmas».
Todo el deporte español también tuvo palabras de recuerdo y agradecimiento por el comportamiento del jugador brasileño dentro y fuera de las canchas. Clubs aragoneses como el Real Zaragoza, el Huesca, el Tecnyconta Zaragoza, entre otros, e incluso otros equipos del país mostraron su deportividad. Una de las reacciones más destacadas fue la del Unicaja Almería, el histórico rival por los títulos nacionales del Teruel.
Las instituciones rápidamente mostraron su pesar. La Diputación Provincial de Teruel envió un comunicado manifestando «su tristeza», y trasladó «su más sincero pésame a la familia y amigos de Vinicius». El Ayuntamiento de Alcañiz, localidad en la que estaba programado el choque de ayer, suspendió las actividades previstas para ayer: el amistoso, la recepción en el consistorio de la plantilla y el encuentro entre éstos y los clubs locales.
