En algún momento de su vida a Luis Carlos Cuartero le debió calar hondo el you'll never walk alone. Malinterpretándolo y disfrazando la lealtad a un escudo de interés particular, el exjugador se ha tomado muy a pecho no dejar solo bajo ningún concepto a Agapito Iglesias, el hombre que le robó el corazón zaragocista, su gran amigo, su amo y al que sigue como Tiago y los futbolistas del Atlético a Simeone: hasta tirarse por un puente si se lo pidiera.

Cuartero se ha convertido en la mano derecha del empresario soriano con todas las connotaciones terriblemente negativas que ese cargo conlleva. El exjugador se afana estos días en ayudar a su jefe a orquestarle una sucesión a su gusto, y por lo tanto que también le interese a Charly. Cada cual elige su camino y Cuartero ha elegido el suyo. Primero que le vaya bien a Agapito Iglesias, luego al Real Zaragoza.