Será por la alarma generada, por las presiones de los agricultores o porque los precios de los productos agroalimentarios empiezan a caer en origen. Pero pese a que ayer no se esperaban anuncios significativos que mejoraran las perspectivas de los agricultores europeos ante el veto ruso, finalmente hubo buenas nuevas: el comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, se comprometió a que a principios de la semana que viene presentará "la próxima medida para estabilizar el mercado, centrada en varios productos de frutas y verduras perecederas que ahora claramente están en dificultades". "Esta acción será proporcionada y rentable", agregó.

La Comisión Europea había convocado al grupo de expertos en agricultura (más técnicos de los países miembros) ayer en Bruselas para analizar, en un principio, cuáles son los productos más afectados por la prohibición de Rusia de importar alimentos de la Unión Europea (UE), EEUU y Canadá, entre otros. Pero países como España, Grecia, Francia e Italia reclamaban algo más que un simple análisis numérico de la situación, pues el boicot requiere "medidas de urgencia", como reclamó el representante del Ministerio de Agricultura español, que también pidió que se aumente el precio que se paga a los productores por retirar mercancía del mercado.

MECANISMO DE SEGUIMIENTO Y la demanda tuvo efecto: más allá de anunciar que se pondrá en marcha un "mecanismo de seguimiento" que permitirá tener un "acceso rápido y mejor a los datos del mercado" con la colaboración de los Estados miembros, el comisario Ciolos movió ficha: "Estoy preparado para proponer medidas a nivel de la UE cuando sean necesarias. Los productores de toda la UE pueden estar seguros de ello", aseguró el comisario

Ciolos recordó que la Política Agrícola Común (PAC) reformada ofrece los "instrumentos presupuestarios y legales" necesarios, como un fondo de crisis que para el 2014 cuenta con un presupuesto de 423 millones de euros. Con esa mención, de paso, descartó la reclamación de que se aumentaran los fondos europeos destinados a la cuestión.

La Comisión también mencionó por primera vez a los productores de carne. "Se están estudiando otras medidas dirigidas a los productos animales", aseguró la Comisión en una nota. Y, además, se convocó una reunión extraordinaria de los ministros de Agricultura de la UE para el próximo día 5 de septiembre.

A la espera de saber las medidas concretas y a qué productos afectarán, las consecuencias del veto ruso se siguen haciendo visibles en España. La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), por ejemplo, denunció que ante la alarma generada la gran distribución ha aprovechado para "bajar injustificadamente los precios" y "hacer su agosto". La organización protestó ayer en Sevilla ante la embajada de la Federación Rusa, cuya cónsul honoraria se comprometió a reunirse en los próximos días con responsables del sindicato.

NUEVA LISTA ACTUALIZADA Pero si en los países productores el boicot se hace patente, también se nota en los supermercados rusos, que han visto cómo sus almacenes se han ido vaciando progresivamente por la prohibición de importar. Por ello, el Gobierno ruso anunció que modificará la lista de alimentos vetados, permitiéndose la importación de productos para diabéticos, alérgicos y complementos dietéticos para deportistas, así como semillas y piensos para los cultivos agrícolas, con el fin de garantizar la "competitividad" de la producción doméstica.

La lista actualizada se dará a conocer hoy, y probablemente también se levantará la sanción a Groenlandia y las Islas Feroe, que exportan grandes cantidades de pescado al mercado ruso. "Nuestras acciones son: primero, legales; segundo, fundadas, y además irán en beneficio de la economía", aseguró ayer el presidente ruso, Vladimir Putin, que defendió la prohibición.