La plataforma de Trabajadoras del Hogar se concentró ayer en Zaragoza para exigir sus derechos y que las mujeres inmigrantes puedan romper el «doble techo» que sufren y que les impide salir de una espiral de abusos y malas condiciones laborales. Así lo denunció Talita de Fátima Bisco, portavoz de la plataforma, quien tras siete años como empleada del hogar pudo terminar su carrera de Derecho y atender desde una asesoría a mujeres inmigrantes. «No tenemos derecho a paro, no podemos tener vida propia ni pedir la baja», dijo.

Por ello, las empleadas del hogar piden al Gobierno de España que ratifique el Convenio 189 de la OIT, en vigor desde 2013, que les garantizaría derecho a la prestación por desempleo, a la creación de un fondo de garantía salarial, igualdad de derechos en la Seguridad Social con el resto de personas trabajadoras o inspecciones de trabajo más eficaces.