Los diez vocales electos en los comicios celebrados el pasado día 9 en el Consejo Regulador de la Denominación de Origen (DO) Jamón de Teruel deberán volver a reunirse mañana para buscar alternativas después de que ayer no alcanzaran ningún consenso, en la constitución del pleno, para designar al presidente y al vicepresidente de la institución. Ocho de ellos propusieron para el primer cargo a Fernando Calvo, máximo responsable de la comisión gestora que ha dirigido la DO desde enero. Sin embargo, el Gobierno de Aragón "no está de acuerdo" con que Calvo asuma el cargo "porque es un funcionario, que fue designado para esta misión de forma transitoria", lo que va contra la filosofía de los consejos reguladores, donde se contempla "autonomía de funcionamiento e independencia", según argumentaron desde el departamento de Agricultura.

El protagonista, por su parte, no ha respondido a la oferta ni que sí ni que no, pero, según ha podido saber este diario, "acata" la decisión de la consejería que dirige Modesto Lobón. En cualquier caso, está "agradecido" por la propuesta y por que "hayan sabido valorar el trabajo" que ha desarrollado al frente de la junta gestora. La DGA insistió en que "la compatibilidad de los cargos no es plena", ya que de Calvo --jefe del Servicio de Industrialización Agroalimentaria-- depende la concesión de muchas ayudas y subvenciones a las que puede optar la DO. Cabe destacar que cualquiera de los vocales electos podría ser escogido presidente.

EN MINORÍA Los otros dos vocales discordantes (Jamones Bronchales y Alvimar) propusieron como presidente a García Belenguer, ya que "nadie ha hablado con nosotros para llegar a un consenso y él tiene ganas de trabajar por el jamón de Teruel, es el único que se presentó y se quedó fuera del consejo", justificaron. "Nada tiene validez desde que la DGA impuso la junta gestora, algo que hemos denunciado en los tribunales. Esto es el mayor pucherazo en la historia de España porque impusieron el voto censitario sobre el sufragio universal", se quejaron.