La Bolsa de Sao Paulo suspendió ayer la cotización de las acciones de la filial de Parmalat, después de que la prensa publicara que una empresa competidora ha solicitado la declaración de quiebra de la división brasileña de la firma italiana. Según la información del diario Folha de Sao Paulo , la compañía de productos alimentarios Orlandia, que posee fábricas en cuatro estados brasileños, ha reclamado la declaración oficial de insolvencia de Parmalat Brasil. La demanda, que fue presentada ante un tribunal de Sao Paulo, podría ser retirada si existe un acuerdo entre ambas partes.

La crisis de la compañía italiana dio ayer un nuevo giro, al saberse que la investigación judicial se ha extendido ya a algunos políticos. Una fuente próxima al caso admitió que las pesquisas se están centrando en "bancos y políticos". Ayer, los fiscales que investigan las relaciones de Parmalat con varios bancos se reunieron con los abogados de Citigroup.