La aragonesa María Domínguez fue alcaldesa de la localidad zaragozana de Gallur entre julio de 1932 y febrero del año siguiente convirtiéndose así en la primera mujer en la historia de España en ostentar ese cargo en democracia (ya hubo un caso precedente de otra mujer, Matilde Pérez Mollá, en la localidad alicantina de Cuatretondeta, pero durante la dictadura de Miguel Primo de Rivera).

El trabajo de las asociaciones Arico y Charata han logrado localizar sus restos situados en el cementerio de Fuendejalón, donde fue fusilada en las primeras semanas de la Guerra Civil Española por el bando sublevado. Ahora solo queda que el Gobierno de Aragón, quien se ha hecho cargo de los restos, verifique que son los de María.

A raíz de esto y sobre el tema del acceso de la mujer a las instituciones públicas en España, recordé una investigación realizada por Carmen Romeo Pemán y publicada en su web www.letrasdesdemocade.com sobre un caso sin precedentes que supuso una entrada masiva de mujeres en cientos de ayuntamientos españoles. Fue de hecho un caso que afectó de lleno a María Domínguez y lo que hizo que a principios de febrero de 1933 tuviera que dejar su cargo de alcaldesa en Gallur.

En las elecciones municipales del 12 de abril de 1931 que conllevaron la proclamación de la república se usó la ley electoral vigente por entonces, que databa de 1907 y que se conocía como la ley Maura. En su artículo 29 se especificaba que si en un ayuntamiento se presentaba una sola lista automáticamente esta pasaba a conformar la corporación local. Esto ocurrió en algo más de 2.500 ayuntamientos españoles, lo que motivó que el 23 de abril de 1933 se celebraran unas nuevas elecciones municipales, las primeras en las que votó la mujer en España, en todos estos ayuntamientos para elegir una nueva corporación de forma democrática.

Ese fue el caso de Gallur, que aunque había sido elegida en su momento una corporación de mayoría socialista tuvo que dimitir en bloque por un caso de corrupción y fue entonces cuando la gobernación civil estableció a María Domínguez como alcaldesa. Al no haber sido elegida por vía democrática (aunque sí según la legislación republicana del momento), María cesó en su cargo a comienzos de febrero de 1933 al igual que en esos más de 2.500 municipios del resto de España, siendo sustituidos los ediles por las llamadas Juntas Gestoras. Estas apenas estuvieron trabajando 2 meses y medio pero desempeñaron su función, por lo general, de forma impecable y diligente, estando encargadas de dirigir esos ayuntamientos hasta las elecciones de abril.

Estas gestoras son un caso sin parangón en la historia de España, pues ni antes ni después en los años siguientes se produjo una entrada tan masiva de mujeres en las instituciones públicas. Tan solo con los datos de los 129 municipios de la provincia de Zaragoza que maneja Carmen Romeo en los que hubo que realizar ese proceso electoral se contabilizan 18 alcaldesas y 34 concejalas. 52 mujeres, muchas de ellas maestras, que comenzaron a trabajar en los diferentes ayuntamientos para gestionarlos en ese periodo y asegurar unas elecciones limpias y legales. También es curioso el hecho de que en una amplia mayoría estas mujeres fueran maestras (igual que en el caso de María Domínguez), lo que muestra la importancia que se le estaba dando a un cuerpo profesional tradicionalmente muy maltratado y más en esa época y al que el nuevo régimen republicano trató de dar un importante impulso.

Alcaldesas y localidades

Elvira Antorán Martínez, Villanueva de Huerva.

Clementina Bilbao Nieto, Lituénigo.

Antonia Bosque Barberán, Ardisa.

Victoria Cereza Puyol, Gelsa.

Josefina Conde Álvarez, Clares de Ribota.

Concepción Cortadé Romeo, Alpartir.

Manuela Blasco Pardillos, Torrellas.

Felipa Elizondo Inda, Tierga.

Laurentina Frías Gil, Alforque.

Estrella García Pérez, El Frasno.

María Gil Martínez, Tiermas.

Julia Hernández García, Rueda de Jalón.

Cecilia Latre Cañada, Bureta.

Francisca Laguía Bernal, Novillas.

Adelina Muñoz Foved, Lobera de Onsella.

Isabel Conrada Pemán Cardesa, Magallón.

Emilia Rodríguez Suils, Almochuel.

Jerónima Agustina Sebastián Cebrián, Balconchán.