Seis proyectos expositivos de disciplinas como la fotografía, la arquitectura, la pintura y el diseño, que buscan atraer al arte moderno y contemporáneo a un público popular y transversal y que hasta el 2024 rotarán en 19 muestras por la red de CaixaForum del país (Barcelona, Madrid, Zaragoza, Palma, Girona, Tarragona, Lérida y Valencia), es el resultado de la «alianza estratégica» -en palabras de la directora general de la Fundación Bancaria la Caixa, Elisa Durán- entre esta entidad y el Centro Pompidou de París.

Presentado ayer, este acuerdo -que dará su primer fruto en Zaragoza en 2020 con una muestra sobre fotografía y ciudad- complementa los que CaixaForum ya mantiene con otros grandes centros culturales como el Louvre, el British Museum o el Prado, que miran más hacia el pasado artístico. El Pompidou, que cuenta con la colección de arte moderno y contemporáneo más importante de Europa (con un fondo de 120.000 obras, de las que solo expone un 5%), aportará piezas en su mayoría inéditas en España y el comisariado y, según Durán, sumará «una mirada de la cultura a la modernidad y hacia el futuro» en la que no faltarán «creadores de nuestro país».

Para el presidente del Centro Pompidou, Serge Lasvignes, esta alianza les permite «descentralizar» y «diseminar sus obras», algo que empezó a hacer en Francia, donde abrió un centro en Metz (350.000 visitantes anuales), con el que, señala, han logrado atraer a un público más popular que el que recibe la casa madre parisina (tres millones y medio de visitas), sin olvidar el Pompidou de Málaga, el de Bruselas o el de Shanghái (y, pronto, otro en Asia avanza). Y ese es el objetivo que comparten con CaixaForum, llegar a un nuevo «público que habitualmente no se acerca al arte».

Con obras de Paul Strand, Marc Riboud, enri Cartier-Bresson, Diane Arbus, Manel Armengol, Luis Buñuel, Francesc Català Roca o Carlos Pérez de Rozas, la primera exposición (en Zaragoza, en 2020), será Cámara y ciudad. Escenas de la modernidad, que explorará cómo fotógrafos y cineastas han documentado el escenario urbano desde principios del siglo XX.

En el 2021 será el turno de una retrospectiva de Jean Prouvé, que presidió el jurado que eligió el proyecto de Renzo Piano y Richard Rogers para construir el Pompidou y que antes de arquitecto, ingeniero y diseñador fue herrero, destaca Lasvignes, y un creador «con una gran pasión por el trabajo industrial» sin el que es imposible «entender la modernidad».

La fotografía, en este caso experimental, será objeto de otra muestra en el 2023. «Descubrirá un continente muy desconocido para el gran público, el de la fotografía al servicio de la creación», indica Lasvignes, sobre un proyecto que asociará las imágenes sin cámara de Man Ray, László Moholy-Nagy y Christian Marclay, recordará fotomontajes de Pierre Boucher o Barbara Kruger, y procesos alquímicos y juegos de luz.

Fruto de un «sueño» del propio presidente del Pompidou, surgirá: La forma sigue la naturaleza. El bioformismo (2023), que con obras de los años 70 y 80 de grandes como Picasso, Kandinsky, Calder, Miró o Matisse mostrará «cómo los artistas modernos y contemporáneos se inspiran en las formas naturales».

Ese mismo 2023 (en este caso solo en Barcelona y Madrid) llegará la exposición protagonizada por Robert y Sonia Delaunay. «Tuvieron una vida de artistas en pareja en el París loco de antes de la primera guerra mundial. Vivieron sumergidos en la modernidad en cuerpo y alma -apunta Lasvignes- Ella misma diseñaba sus propios tejidos y vestidos, que lucía en los bailes y fiestas. Estaban obsesionados con el color y el movimiento». A través de un centenar de obras (pinturas, dibujos, relieves, mosaicos, maquetas, telas con corbatas incluidas, fotos y documentos) se recorrerá la carrera de estos dos maestros de la abstracción y las vanguardias.

El diseño de los años 70 y 80 protagonizará una exposición que llegará a Lérida, Gerona y Tarragona.