El Ayuntamiento de Belchite ha incoado expediente de dominio para inscribir a su nombre cuatro fincas urbanas singulares del viejo pueblo abandonado años después de la Guerra Civil. Este paso, según explicó ayer la alcaldesa de Belchite, la socialista María Angeles Ortiz, se realiza con el objetivo de "poder recibir ayudas de las administraciones públicas para futuros proyectos que pudieran surgir", sin que por el momento exista ninguno definido.

Según un edicto hecho público hace pocos días por el magistrado del Juzgado de Primera Instancia número 13 de Zaragoza, Angel Iribas, el ayuntamiento plantea inmatricular la Torre del Reloj, el Arco de San Roque, el Arco de la Villa y el Trujal Mausoleo a los Caídos.

El Ayuntamiento de Belchite no prejuzga de antemano su titularidad sobre estos bienes y está abierto a cualquier reclamación al respecto que surja tras la exposición pública del expediente. La alcaldesa señaló que se trata "de un primer paso" para avanzar "si no hay conflicto".

La Torre del Reloj, situada en la calle Mayor del viejo pueblo, pertenecía a la desaparecida iglesia de San Juan Bautista. Existe constancia de esta torre mudéjar desde 1569. En 1765 la torre disponía de un reloj. Según Madoz, en 1846 la iglesia se convertía en teatro. Posteriormente fue un bar (Bar Magaldo) y salón de baile (Las Pampas).

Los arcos de San Roque y de la Villa corresponden a sendas puertas del antiguo pueblo. La primera situada en el extremo Este y la otra, al Noroeste. Este último arco es de construcción barroca del siglo XVIII con doble función de puerta y de capilla en la parte superior. El Trujal pertenece a una antigua casa urbana de la calle Mayor y a él fueron arrojados multitud de cadáveres durante el sitio de Belchite. En 1955 esa finca fue cedida por sus propietarios al ayuntamiento.