La iglesia de San Pablo de Zaragoza se convirtió ayer, durante un día, en el interior de la catedral de Tarazona, en obras durante veinte años según cuenta la novela homónima de Miguel Mena en la que se basa la película Bendita calamidad. Aprovechando las obras de la iglesia, se grabó ayer por la mañana una escena con Carlos Sobera, Juan Anillo y Gorka Aguinagalde, los tres actores que encarnan a los tres malos de la historia. La secuencia muestra la entrada de los tres personajes a la catedral con el objetivo de robar unas obras de arte. Las tomas de la escena se vieron inundadas dentro y fuera por la comedia del guion y los actores.

El equipo al completo se reunió ayer en Zaragoza para seguir el rodaje de Bendita calamidad. Carlos Sobera, Juan Anillo, Gorka Eguinagalde, Jorge Asín, Nacho Rubio y un recién incorporado Luis Varela se pusieron ayer a las órdenes del director Gaizka Urresti.

Luis Varela ya rodó, con unos doce años de edad, en Alhama de Aragón en la película Los jueves, milagro de Luis García Berlanga; en Zaragoza un corto de Samuel Zapatero; y en el Teatro Principal ha trabajado muchas veces. Sin embargo, se incorpora a esta película con la misma ilusión, esta vez para encarnar al obispo de Tarazona que es secuestrado por los hermanos Fayos. Reconoció que aunque "ha sido todo tan rápido", le gusta el proyecto, el guión y el personaje y afirmó que está "trabajándolo para que lleguemos a buen puerto". Quiso destacar que los compañeros "son unos fenómenos tanto como actores como personas" y quiso agradecerle a todo el equipo la ayuda prestada en su repentina incorporación.

TRÍO DE MALOS Por su parte, el zaragozano Jorge Asín explicó que su personaje, Anselmo, es "un chavalín que ha crecido a la sombra de su hermano pequeño Ricardo" y que debido a la locura de su hermano, se ve "abocado a mil y un desastres". El turolense Nacho Rubio encarna a Ricardo, el segundo hermano protagonista. Ambos ya trabajaron juntos en el cortometraje El sobrino, en el que a sus personajes les unía también una relación de parentesco. Bromearon sobre ello y mostraron una gran compenetración. "Nos lo estamos pasando en grande, a veces para horror del director", bromeó Rubio.

Carlos Sobera, de padre oscense, interpreta al "corrupto medio español" que en vez de estar respaldado por tipos duros, está rodeado de Gorka Aguinagalde en el papel de Caín, "un macarra" según el actor, y un tipo con pocas luces interpretado por Juan Anillo que como el mismo explicó "es la fuerza bruta del clan", aunque reconoció que tiene "su punto entrañable". Es la primera vez que Sobera rueda en Zaragoza, aunque si que ha estado en dos ocasiones haciendo teatro en el Principal. "Artísticamente, Zaragoza es una ciudad muy querida para mi", declaró Sobera.

Gaika Urresti contó que volverán "a Tarazona una semana para rodar el inicio de la película: todo lo que tiene que ver con el ayuntamiento y el Cipotegato", que recrearán con la ayuda vecinal. Las dos últimas semanas, el equipo concluirá el rodaje en la comarca del Moncayo en la que rodarán los escondites en los que los hermanos Fayos tienen que refugiarse para escapar de ser arrestados por secuestro.

Aunque todos los actores, ya al completo, están concentrados en el proyecto actual de Bendita calamidad, todos tienen ya planes programados posteriores al rodaje. Luis Varela explicó tener dos proyectos pero no quiso contar más porque reconoció que es "muy supersticioso". Jorge Asín sigue con sus bolos teatrales y se encuentra sumergido en la preparación de la nueva temporada de Oregón TV. Nacho Rubio recordó que el 21 de agosto representará en el Centro Joaquín Roncal una obra de teatro titulada Los Menudillos de El Sol de York. Y Jorge Asín quiso terminar expresando que "este año es especial, ya que hay mucha película aragonesa y esperemos que sea un primer paso para que continúe". La siguiente escena que el equipo ruede en Zaragoza será en un centro de negocios que recreará una comisaría de policía.