La IX Feria Pirenaica de Luthiers "Pirenostrum" ha convertido este fin de semana a la localidad de Boltaña (Huesca) en la capital de los instrumentos musicales tradicionales.

Procedentes de España y Francia, medio centenar de luthiers participan en esta cita inaugurada por el consejero de Industria de Innovación, Arturo Aliaga, quien se ha desplazado a la localidad pirenaica.

Esta edición, que incluye conciertos y espontáneas actuaciones, es un marco idóneo para mostrar instrumentos musicales fabricados artesanalmente por los mejores luthiers de ambas vertientes pirenaicas y escuchar la música hecha con ellos componen.

La Feria, que promueve el Ayuntamiento, se concentra en patios, bodegas y otros espacios singulares del casco antiguo de esta emblemática localidad pirenaica, y es una cita obligada cada dos años para los constructores de instrumentos tradicionales de cuerda, viento, arco o percusión.

Gaitas gallegas y aragonesas, cornamusas, tambores, carracas, castañuelas, cajones flamencos, chiflos, liras, salterios, guitarras, dulzainas, requintas, xeremíes mallorquines o txalapartas vascas son algunos de los numerosos instrumentos que se oyen estos días en las calles de Boltaña.

Aunque la mayor parte de los luthiers son de Aragón, un total de 13, también los hay procedentes de Galicia (7), Cataluña (5), Euskadi (3), Valencia (2), Madrid (2), Cantabria (2), Asturias (2), Castilla-La Mancha (2), Baleares (1), Andalucía (1) y Castilla y León (1), a los que acompañan siete de Francia.

Entre los luthiers más destacados se encuentra el Obradoiro Gaitas Seivane, propiedad del padre de la gaitera gallega Susana Seivane y Premio Nacional de Artesanía en 2014.